Jueves, 25 de abril de 2024

Embarques de banano y piña son donde más cocaína incauta la Policía

Autor:

Gabriela Coba

Actualizada:

31 May 2022 - 0:05

En los cuatro primeros meses del año 18 personas han sido detenidas en los puertos marítimos de Ecuador, según la Dirección Nacional de Investigación Antidrogas de la Policía Nacional.

Incautación de siete toneladas de droga en el Puerto Marítimo de Guayaquil, en febrero de 2022.

Autor: Gabriela Coba

Actualizada:

31 May 2022 - 0:05

Incautación de siete toneladas de droga en el Puerto Marítimo de Guayaquil, en febrero de 2022. - Foto: Policía Nacional/Twitter

En los cuatro primeros meses del año 18 personas han sido detenidas en los puertos marítimos de Ecuador, según la Dirección Nacional de Investigación Antidrogas de la Policía Nacional.

La Policía Nacional ha incautado cerca de 32 toneladas de cocaína en los puertos marítimos, de Ecuador, entre enero y abril de 2022.

Es un incremento de 117% frente a los cuatro primeros meses de 2021, cuando las autoridades hallaron 14,7 toneladas de cocaína en embarques de productos de exportación.

El 67% de la cocaína incautada este año fue encontrada en cargamentos de banano. Le siguieron los embarques de piña y de cacao, con el 8% en cada caso.

También figuran los contenedores de té de guayusa, de madera, de harina de camarón y hasta de chatarra.

Unas 90 personas han sido detenidas como parte de los controles antinarcóticos en los puertos del país, entre 2020 y lo que va de 2022.

Solo entre enero y abril de 2022, se cuentan ya 18 detenidos.

Atacan en Guayaquil

De las cinco terminales portuarias de Ecuador, el Puerto Marítimo de Guayaquil es donde se registra la mayor cantidad de cocaína incautada desde 2020, según la Dirección Antidrogas.

Contecon, la empresa a cargo de este puerto, asegura que ha puesto en marcha "diferentes medidas de control como parte de toda la cadena logística, de manera coordinada con transportistas, exportadores, depósitos y autoridades, a fin de garantizar la seguridad de la carga mientras se encuentre en sus instalaciones".

La empresa asegura que ha destinado USD 300.000 en cámaras refrigeradas para facilitar las inspecciones antinarcóticos.

Y ha destinado USD 3,5 millones a "infraestructura, equipamiento y gastos operativos" para frenar la contaminación con cocaína de los embarques.

La meta, según Contecon, es reforzar la seguridad en el puerto, "mediante un acuerdo de cooperación con la Policía".

Róterdam quiere revisar todo

La mayor parte de la cocaína incautada este año en los puertos de Ecuador tenía como destino Bélgica.

Otros países a los que apuntan los narcotraficantes son Holanda y Lituania, según la Policía Nacional.

En ese contexto, el puerto de Róterdam, en Holanda, anuncia su intención de someter a control todos los contenedores de frutas tropicales procedentes de Sudamérica y Centroamérica.

Sobrepasado por las actividades de las mafias, el puerto de Róterdam busca prevenir el ingreso de contenedores contaminados, según la agencia de noticias EFE.

Actualmente, la revisión de carga en Róterdam es aleatoria y permite chequear "un escaso 1%" del total de los contenedores que llegan a esa terminal.

Holanda es el país de la Unión Europea que más frutas importa, con alrededor del 30%.

Sobrecostos para exportadores

El banano se ha mantenido como el tipo de cargamento favorito de los narcotraficantes a la hora de infiltrar sus paquetes de cocaína.

Representantes bananeros han dicho que el transporte de sustancias ilegales, introducidas de manera subrepticia en los productos de exportación, les cuesta cerca de USD 200 por contenedor.

El costo se deriva del control y la supervisión que deben hacer los exportadores a los embarques de productos para impedir que los contaminen.

La amenaza del narcotráfico, que deriva en retrasos y pérdidas, eleva el riesgo de que los importadores empiecen a preferir productos y frutas que provengan de otros países.

A los importadores les preocupa que los contenedores lleguen con cocaína a los puertos de destino, porque eso desencadena procesos de investigación, explica Juan José Pons, representante del sector bananero.

Así, el narcotráfico no solo se convierte en una amenaza para la seguridad en Ecuador, sino también en un enemigo de las exportaciones de productos legales.