Salud

Yogur un aliado en la prevención de cáncer de mama

Autor:

Redacción Comercial

Actualizada:

18 Oct 2021 - 15:36

Una dieta saludable puede reducir el riesgo de diversas enfermedades, entre las que destacan varios tipos de cáncer, tomando esto en cuenta, el yogur puede ser un aliado ideal.

Salud

Autor:

Redacción Comercial

Actualizada:

18 Oct 2021 - 15:36

- Foto: Olga Zarytska, Adobe Stock

Una dieta saludable puede reducir el riesgo de diversas enfermedades, entre las que destacan varios tipos de cáncer, tomando esto en cuenta, el yogur puede ser un aliado ideal.

Alimentarse no equivale a nutrirse; mientras el primero implica simplemente la acción mecánica de ingerir alimentos, el segundo se centra en la adecuada absorción de nutrientes y sustancias en el organismo.

“Una dieta saludable no solo nos protege de la malnutrición en todas sus formas, sino también de enfermedades no transmisibles como la diabetes, las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares y el cáncer”.

Organización Mundial de la Salud (OMS)

Es evidente que la nutrición juega un papel fundamental en el tratamiento del cáncer. Consumir alimentos adecuados antes, durante y después de las terapias proporciona al cuerpo la fuerza necesaria para combatir la enfermedad.

La gastroenteróloga y máster en nutrición Karen Alarcón subraya que el 40% de los tumores pueden prevenirse mediante una alimentación equilibrada.

Imagen despiece

"Una persona que aprende a comer y nutrirse puede disminuir y neutralizar la producción de radicales libres, que son los implicados en el desarrollo de enfermedades crónicas y cáncer".

Foto: Karen Alarcón @drakarenalarcon

Tanto el American Institute for Cancer Research como el World Cancer Research Fund ofrecen recomendaciones para la prevención del cáncer a través de la alimentación:

  • Mantener una dieta equilibrada basada en frutas, verduras, legumbres y cereales no refinados.
  • Limitar el consumo de azúcares refinados.
  • Moderar el consumo de carnes rojas y optar por pollo o pescado.
  • Evitar el consumo excesivo de alimentos salados.

A pesar de estas advertencias, existen alimentos que pueden ayudar a prevenir el cáncer. La dieta mediterránea, por ejemplo, rica en vegetales, aceite de oliva, pescado azul, frutos secos y legumbres, es destacada por Alarcón.

Además, diversos compuestos activos presentes en estos alimentos, como antioxidantes, fitoquímicos, folatos, sulforafano y carotenoides, han demostrado inhibir el crecimiento y la proliferación de células cancerosas.

Yogur en la salud humana

Según un estudio de la Revista Lasallista de Investigación, el yogur, producto derivado lácteo obtenido por la fermentación de bacterias ácido-lácticas de la leche, ofrece beneficios para la salud, incluida la reducción del riesgo de algunos cánceres.

Los probióticos presentes en el yogur y el kéfir se han asociado a un menor riesgo de desarrollar cáncer, ya que disminuyen la absorción y producción de sustancias carcinógenas, así como la formación de tumores, gracias a sus componentes como el calcio, las vitaminas del grupo B y la vitamina A.

Un apoyo contra el cáncer de mama

El cáncer de mama es uno de los más comunes en mujeres a nivel mundial. Estudios sugieren que el consumo diario de yogur puede ayudar a prevenirlo, gracias a sus compuestos antiinflamatorios y de defensa.

Investigadores de la Facultad de Medicina y Salud de Lancaster han observado que los lácteos fermentados con Lactobacillus helveticus pueden retardar el crecimiento tumoral.

Alarcón menciona que existen diferencias entre los yogures procesados y los naturales, siendo los primeros menos recomendables debido a su potencial inflamatorio y su asociación con un mayor riesgo de cáncer y enfermedades metabólicas debido a su contenido elevado de azúcar y preservantes.

En resumen, la alimentación desempeña un papel crucial en la prevención del cáncer. Los avances médicos han demostrado cómo ciertos alimentos y nutrientes pueden contribuir a combatir esta enfermedad. Es fundamental promover una dieta equilibrada y consciente, incluyendo el consumo de alimentos como el yogur y los lácteos fermentados. La clave está en tomar decisiones informadas sobre nuestra alimentación para proteger nuestra salud.