Miércoles, 24 de abril de 2024

Huérfanos de femicidios enfrentan obstáculos para acceder al bono

Autor:

Jonathan Machado

Actualizada:

19 Sep 2022 - 5:22

Organizaciones sociales aseguran que solo en 2022, al menos 114 niños y adolescentes perdieron a sus madres, víctimas de femicidios.

Una niña que perdió a su madre víctima de femicidio juega en su habitación, el 15 de septiembre de 2022.

Autor: Jonathan Machado

Actualizada:

19 Sep 2022 - 5:22

Una niña que perdió a su madre víctima de femicidio juega en su habitación, el 15 de septiembre de 2022. - Foto: Primicias

Organizaciones sociales aseguran que solo en 2022, al menos 114 niños y adolescentes perdieron a sus madres, víctimas de femicidios.

Andrés y María son dos niños de 10 y ocho años de edad que perdieron a su madre luego de que fuera golpeada y abusada sexualmente.

El 8 de marzo de 2022, en medio de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, el cuerpo de la víctima fue encontrado con signos de violencia en una cancha de fútbol del cantón Otavalo.

A pesar de que el caso ya se encuentra en fase de investigación, los dos niños aún no reciben el bono para víctimas de femicidio.

Ese aquel 8 de marzo, el presidente Guillermo Lasso reformó el Decreto Ejecutivo 369 de 2019, con el que estableció que los niños y adolescentes recibirían el bono por femicidio desde el momento en que inicie el proceso de investigación.

Pese a los anuncios presidenciales, no todos los menores que han perdido a su madre por femicidio acceden a la ayuda económica.

Las organizaciones feministas responsabilizan, sobre todo, a la Fiscalía de impedir que los huérfanos perciban el bono.

"En el caso del femicidio ocurrido en Otavalo, hay claros indicios de que se cometió un femicidio, pero el caso está siendo investigado como una violación", dice Paolina Vercourtere, activista social.

"Hay barreras hasta de lenguaje. Los familiares no tienen acceso a información porque todo está escrito en español y ellos hablan quichua. Los fiscales utilizan términos técnicos que no les permite entender el avance de la investigación", reclama.

El caso de Andrés y María no es aislado. David perdió a su madre en 2015 cuando apenas tenía un año edad.

El asesino, quien también es padre del niño, recibió una pena de 34 años de prisión, pues fue juzgado como autor de femicidio. Y David tampoco ha accedido al bono.

Su abuela dice que lo único que el niño recibió por parte del Estado fueron tres meses de terapia psicológica.

"Me pidieron hasta que cree una cuenta de ahorros, pero el dinero nunca llegó", lamenta.

David y su abuela en un parque del sur de Quito, el 4 de diciembre de 2021.

David y su abuela en un parque del sur de Quito, el 4 de diciembre de 2021. Jonathan Machado / Primicias

Según la Fundación Aldea, desde 2014, cuando el femicidio fue tipificado como delito, más de 1.400 niños y adolescentes quedaron en la orfandad. De esta última cifra, 144 menores perdieron a su madre en 2022.

"¿Dónde están los bonos para todos estos niños?, se pregunta Nadya Donoso, representante del Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de la Mujer (Cepam).

Pocos bonos entregados

Datos del Ministerio de Inclusión Social (MIES) aseguran que el bono por femicidio, cuya entrega es mensual, llega actualmente a 160 niños y adolescentes.

La cifra apenas representa el 28,4% de los 563 huérfanos que el Gobierno estimaba en marzo de 2022.

La subsecretaria de Protección Especial, Estefany Jurado, dice el Estado ha destinado USD 262.000 para pagar esta ayuda económica, que tiene variables de acuerdo al número de niños que quedan en la orfandad:

  • Un hijo recibe USD 25,33.
  • Dos hijos reciben USD 183,30.
  • Tres o más hijos: 230,48.

Según las organizaciones sociales, las cifras oficiales "están alejadas de la realidad, pues son las organizaciones las que han hecho el trabajo de levantar la información sobre las víctimas directas e indirectas que dejan los femicidios", dice Geraldine Guerra, vocera de la Fundación Aldea

Jurado reconoce que el MIES no cuenta con cifras exactas sobre el número de mujeres y niños víctimas de este crimen.

Pero asegura que la entidad trabaja, junto a otras instituciones, en un cruce de información para consolidar los datos.

Para evitar que las cifras sigan creciendo sin un registro oficial, la funcionaria plantea que los reportes policiales deberían tener información sobre si la víctima de femicidio tenía o no hijos.

De esta forma, las instituciones sociales los registran y brindan la atención.

Jurado agrega que el objetivo de tener una base consolidada servirá para que las víctimas puedan acceder a otros bonos del Gobierno.

El año con más femicidios

Aunque 2022 aún no termina, ya es el año más violento contra las mujeres.

La Fundación Aldea, organización que registra los casos de femicidio desde 2017, asegura que entre el 1 de enero y el 3 de septiembre, 206 mujeres han sido víctimas de este crimen.

Esta cifra es casi tres veces superior al número de femicidios que se reportaron en 2018, cuando ocurrieron 88 asesinatos.

En total, la fundación contabiliza 1.247 casos de femicidio desde 2014 cuando el femicidio fue tipificado en el Código Orgánico Integral Penal.

Cañar, Los Ríos y Esmeraldas son las provincias que tienen las tasas más altas de femicidio por cada 100.000 habitantes. Mientras que en números absolutos, Guayas, Manabí y Esmeraldas son las que tienen las cifras más altas.