El nuevo rostro de las finanzas: invertir como alternativa moderna al ahorro bancario
Con la baja en las tasas de interés, ahorrar ya no basta. Invertir desde $25 es posible y cada vez más personas lo están haciendo con el respaldo y las herramientas adecuadas. Aquí te contamos quién está facilitando este camino y cómo puedes empezar.

Imagen referencial de una mujer calculando inversión, desde su casa.
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En un contexto donde las necesidades económicas crecen y se vuelve imprescindible una planificación financiera más estratégica, el ahorro tradicional empieza a evidenciar sus límites. Durante décadas, las cuentas de ahorro y los depósitos a plazo fueron opciones para proteger el capital; sin embargo, su rentabilidad ha comenzado a disminuir, como lo refleja la reciente caída en las tasas de interés pasivas en Ecuador.

Como se evidencia, en el último año, las tasas de interés para depósitos a plazo han mostrado una tendencia descendente, pasando de un 8.45 % en julio de 2024 a 7.19 % en enero de 2025. Esta caída sostenida puede influir en la rentabilidad esperada en quienes buscan instrumentos tradicionales de ahorro.
Aunque los depósitos a plazo todavía son una posibilidad válida para perfiles conservadores, alternativas como los fondos de inversión permiten diversificar y mantener rendimientos competitivos sin exponer al inversionista a riesgos excesivos.
La inversión ha dejado de ser un privilegio para convertirse en una opción accesible para más personas.
Actualmente, existen plataformas que ofrecen procesos claros, respaldo institucional y asesoría adecuada, para acceder a soluciones financieras que se ajustan a las distintas necesidades y metas de cada persona, permitiendo que el dinero trabaje de forma más eficiente. Por ejemplo, los fondos de inversión administrados por Capitalium, ofrecen rendimiento esperado que oscila entre el 7.6 % y el 9.2 % anual.
Tipos de fondos de inversión
El fondo de inversión es una forma inteligente de hacer crecer el dinero. Al invertir con Capitalium, se accede a una cartera diversificada de activos financieros, diseñada para equilibrar riesgo y rentabilidad. Esto permite avanzar hacia objetivos con mayor estabilidad, sin necesidad de monitorear constantemente el mercado. Es un camino ideal para quienes buscan tomar decisiones financieras estratégicas, con transparencia, seguridad y proyección a corto y a largo plazo.
Con un aporte inicial desde $25, toda persona interesada en invertir puede hacerlo en cualquiera de estas dos alternativas:
- Fondo de Crecimiento: Pensado para cumplir objetivos a corto plazo, con una permanencia mínima de tres meses y un rendimiento esperado del 7.60 %.

- Fondo Dinámico: Perfecto para planes de mediano a largo plazo, con una permanencia mínima de un año y un rendimiento esperado del 9.20 % anual.

Confianza respaldada
Ambos fondos han mostrado rendimientos estables, convirtiéndose en oportunidades competitivas frente al ahorro bancario tradicional. Además, Capitalium cuenta con una calificación AA+, lo que refleja una alta calidad crediticia y un nivel muy bajo de riesgo. Esta clasificación, la posiciona entre las gestoras más prestigiosas del mercado ecuatoriano, garantizando una administración responsable y sólida de los recursos. Para el inversionista, esto se traduce en confianza, tanto al momento de invertir como al proyectar resultados a mediano y largo plazo.

Herramientas digitales
Esta administradora se apoya en una plataforma moderna y segura, diseñada para ofrecer al usuario control total sobre su dinero. A través de su sitio web, cada persona puede ingresar con su usuario y contraseña para consultar su portafolio, simular nuevas inversiones, realizar aportes y monitorear sus rendimientos de forma clara y eficiente. Todo el proceso se realiza en línea, con un sistema ágil que prioriza la comodidad con acompañamiento profesional.
Ahora, invertir va más allá de buscar cifras atractivas: implica tomar decisiones informadas que generen resultados reales. Elegir instituciones íntegras, marca la diferencia entre simplemente ahorrar y construir patrimonio. En esta nueva etapa de las finanzas personales, invertir ya no es una posibilidad lejana, sino una decisión accesible e inteligente para avanzar con firmeza hacia las metas.
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