Cinco razones para ver 'Viejos malditos', una comedia negra que reúne a un viejo gruñón con un gato adorable
'Viejos malditos' es la película ecuatoriana ecuatoriana que está de estreno y puede verse en cines desde este 6 de noviembre.

A la izquierda, imagen promocional de 'Viejos malditos'. A la derecha, una escena de la película.
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Perros Obesos
Autor:
Alejandro Ribadeneira
Actualizada:
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El cine ecuatoriano atraviesa una pujante etapa o, para ser más precisos, una renovada fase de terquedad de películas que logran circular en festivales internacionales y llegan a los circuitos comerciales de cine. A veces, hay premios que aparecen en este largo camino.
No ha cambiado que los cineastas de Ecuador deban hacer malabares para financiar, producir y distribuir sus películas, pero ahora se percibe un brioso empuje para contar historias de todo tipo en las salas de cine. Y en este contexto aparece 'Viejos malditos', una comedia negra con altas dosis de emotividad que cuenta la historia de un viejo gruñón con la mente en el suicidio que se encuentra con un gato que le cambia la vida.
'Viejos malditos', dirigida por Xavier Chávez, llega a los cines de Ecuador el 6 de noviembre tras un periplo en festivales en el exterior, como el de Chicago. Estas son cinco poderosas razones para animarse a disfrutarla:
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La última película de Jaime Bonelli
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El destino quiso que 'Viejos malditos' sea el último trabajo del actor Jaime Bonelli, colombiano que vivió durante más de tres décadas en Ecuador y que apareció en diversas producciones de cine, teatro y televisión. El director Xavier Chávez pensó en Jaime Bonelli como su primera opción para el papel protagónico y pudo mostrarle un montaje casi definitivo de la película antes de su deceso por un cáncer de pulmón. Bonelli interprea a Elías, el protagonista, un anciano que ha enviudado y se enfrenta a la soledad y al insomnio... por culpa de los maullidos de un gato. ¡Miau!
- 2
Un gato hace historia en el cine de América Latina
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'Viejos malditos' es la primera película de Ecuador y América Latina que tiene a un gato como coprotagonista de un largometraje de acción real. En realidad, el papel del gato Simón lo interpretan la gata Rebeca y sus crías. El argentino Walter Donado, entrenador de animales para el cine (y también actor, véanlo en 'Relatos Salvajes', por ejemplo, y también aparece en 'Viejos malditos') se hizo cargo de adiestrar a Rebeca y los demás gatos para que se comportaran como estipulaba el guion.
- 3
Canto de amor a los gatos
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La gata Rebeca fue rescatada en Manta y llevada con sus crías al refugio Segunda Oportunidad, en Amaguaña, durante la pandemia del covid-19. Al finalizar el rodaje, Rebeca regresó al refugio y ahí permanece hasta el día de hoy, aunque dos de sus crías fueron adoptadas por el equipo de producción. 'Viejos malditos' pretende difundir un mensaje de amor hacia las mascotas y su poder de sanación en los humanos, incluso en los más gruñones y desesperados.
- 4
La vejez, esa edad maldita
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Pero 'Viejos malditos' también ofrece un potente mensaje sobre la incomprensión hacia la vejez y la soledad que enfrentan los adultos mayores. Símbolo de la derrota, el viejo Elías que encarna Jaime Bonelli pasará de contemplar el suicidio a una etapa de resilencia y de aprendizaje, de la mano (o de la pata, más bien) de Simón. Esta visión fue plasmada en el guion de 'Viejos malditos' por Xavier Chávez luego de la muerte de un pariente suyo y quiso reflexionar sobre la tercera edad y rendir un homenaje a los abuelitos de todos nosotros.
- 5
Un rodaje titánico
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Ivonne Campoverde, la productora de 'Viejos malditos', esposa del director, debió resolver los mil y un desafíos que implicó la filmación durante la pandemia a lo largo de cuatro semanas ajustadas a estrictos protocolos de (lo que en ese entonces se denominaba) "bioseguridad". Pero también ha resultado titánica la recaudación de fondos y, sobre todo, atender los mil detalles de un largometraje de estas características. Son detalles que, al final, valieron la pena.
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