Más de 6.000 armas incautadas fueron destruidas por las Fuerzas Armadas en el primer semestre de 2025
El 70% material incautado se descartó por estar "obsoleto" o "con deficiencias", explicó el director de logística del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Marco Rocafuerte.
%pie%
Actualizada:
Compartir:
Las Fuerzas Armadas de Ecuador destruyeron más de 6.800 armas, municiones y accesorios incautados al crimen organizado y a delincuentes comunes durante los tres primeros meses de 2025, como parte de sus operativos desarrollados bajo el "conflicto armado interno" declarado en el país por su presidente, Daniel Noboa, contra las bandas criminales.
La operación tuvo lugar en las instalaciones de una empresa de acero ubicada en la ciudad de Guayaquil, epicentro de la crisis de violencia, donde se utilizaron los hornos de la entidad para fundir todo el material.
Del total destruido fueron:
- 1.051 eran armas de fuego letales
- 147 armas no letales
- 1.516 accesorios
- Más de 3.600 municiones mortíferas
En el acto intervinieron diferentes autoridades militares, entre ellos, el director de logística del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Marco Rocafuerte, quien destacó la labor del personal militar desplegado para combatir el crimen organizado.
Las armas destruidas fueron previamente descartadas para ser utilizadas por el Bloque de Seguridad de Ecuador, que integra a la Policía y las Fuerzas Armadas, además de a los ministerios de Interior y Defensa, para coordinar acciones en el marco del llamado 'conflicto armado interno'.

Si bien una reciente reforma establecida a raíz del referéndum celebrado en 2024 permite a la Policía y a las Fuerzas Armadas equiparse con el armamento incautado a las bandas criminales, estas unidades fueron desestimadas por considerarse que no eran útiles para la formación de las fuerzas de seguridad.
La aprobación de la ley de control de armas en octubre de 2024 permite que las Fuerzas Armadas y demás cuerpos de seguridad nacional puedan recibir material armamentístico incautado a los grupos armados.
Para ello, y según explicó un portavoz militar, las armas deben cumplir "ciertas características en calibre y cadencia de tiro" y, una vez son "inspeccionadas y revisadas", pueden pasar a manos de los profesionales de la seguridad.
Cerca de un 30% del material incautado al crimen organizado ya está en manos de agentes policiales y militares. El 70% restante se descartó por estar "obsoleto" o "con deficiencias", explicó Rocafuerte.
En total, las Fuerzas Armadas de Ecuador han destruido en torno a 32.000 armas de bandas criminales en los últimos cinco años.
Desde inicios del año pasado, el presidente Noboa elevó la lucha contra el crimen organizado a la categoría de "conflicto armado interno", con lo que pasó a catalogar a estas bandas como grupos terroristas, a la vez que decretó un estado de excepción con el que, entre otras acciones, militarizó las cárceles controladas por estas organizaciones.
Compartir: