El color de tu auto podría marcar la diferencia al momento de venderlo

¿Amarillo, naranja o verde? No son comunes pero podrían ser los más inteligentes. Al momento de comprar un auto, muchos priorizan el modelo, la marca o incluso el equipamiento. ¿Y si el color también influyera en su valor futuro?

Más allá de lo estético, este puede ser un factor clave para reducir la depreciación de un carro con el paso de los años. Así lo demuestra el más reciente estudio de iSeeCars, que analizó más de 1.2 millones de vehículos usados en Estados Unidos, con tres años de antigüedad, para identificar los colores que mejor y peor conservan su valor.

Así es cómo el color marca la diferencia

Según el informe, los tonos más raros —como el amarillo, naranja y verde— presentan una depreciación significativamente menor que los tonos más tradicionales como el blanco, negro o gris. La razón: su baja oferta en el mercado de usados y la percepción de exclusividad que generan.

Por ejemplo:

• El amarillo lidera como el color que menos se deprecia.
• Le siguen el naranja y el verde, especialmente en segmentos como SUV, pickups y deportivos.
• En contraste, los carros dorados son los que más valor pierden con los años.

¿Por qué influye tanto el color?

Karl Brauer, analista ejecutivo de iSeeCars, explica que los tonos llamativos conservan mejor su valor porque:

1. Hay menos unidades disponibles, lo que reduce la competencia en la reventa.
   

2. Se destacan visualmente, lo que los hace más deseables para compradores que buscan algo diferente.
   

3. En ciertas categorías, como coupés o convertibles, los tonos vibrantes son más aceptados y buscados.

Hallazgos clave por segmento

¿Y en países como Ecuador?

Aunque esta investigación se basa en el mercado de EE. UU., la lógica es aplicable: los colores menos comunes suelen tener menor competencia al momento de la venta, lo que puede suponer una ventaja en casi cualquier país.

• Mantén impecable la pintura de tu SUV

Es importante recalcar que la depreciación de un auto también depende de factores como el cumplimiento de los mantenimientos, el cuidado del interior y exterior, evitar modificaciones no originales y conservar un historial de servicio completo. Cuidar estos aspectos puede ayudarte a mantener o incluso mejorar el valor de reventa con el tiempo.