La hinchada de Emelec: La más fiel, pero la más problemática
Las barras de Emelec volvieron a ser el centro de la polémica, tras los violentos incidentes en el estadio George Capwell en el Clásico del Astillero. La hinchada del 'Bombillo' es la que más va al estadio en nuestro país, pero también la que más problemas ha causado.

Los hinchas de Emelec, durante el Clásico del Astillero ante Barcelona SC por la LigaPro, el 14 de septiembre de 2025.
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La hinchada de Emelec es la más fiel de los equipos ecuatorianos. El 'Bombillo' lleva cuatro temporadas consecutivas (incluyendo esta) como el club más taquillero de la LigaPro.
En 2022, vendió un promedio de 11.492 boletos por partido; en 2023 fueron 11.587 entradas por encuentro; en 2024 este número aumentó a 12.124 boletos por cotejo y, hasta el momento (y sin contar el último Clásico del Astillero), los eléctricos han vendido 11.813 entradas por partido en 2025.
Estos números de asistencia son muy destacados, teniendo en cuenta que, en los últimos años, Emelec ha vivido una de las peores crisis de su historia.
En 2022 terminó sexto en el campeonato nacional; en 2023 cayó al puesto 11 y no se clasificó a competencias internacionales; en 2024 finalizó décimo y por segundo año seguido quedó fuera de torneos Conmebol; y en esta temporada se encuentra noveno.
En medio de los malos resultados, de problemas dirigenciales, de crisis económica, de deudas que no permitieron fichar jugadores en un mercado y de inestabilidad en el banquillo (seis entrenadores en estas cuatro temporadas), los hinchas de Emelec no han dejado de ir al estadio George Capwell.
La hinchada más fiel, pero la más problemática
Sin embargo, más allá de estos excelentes números de asistencia, los ingresos que se han obtenido en taquilla se han perdido en multas, a partir del violento comportamiento de su hinchada.
El último Clásico del Astillero, disputado el 14 de septiembre, fue una nueva demostración de lo indisciplinado que puede llegar a ser el público en el Capwell, con encendido de bengalas, lanzamiento de papel y, lo más grave, lanzamiento de decenas de botellas de vidrio a la cancha.
Aún no se confirma cuánto llegará a ser la multa por estos incidentes, pero perfectamente podría rondar los USD 80.000 y uno o varios encuentros sin público como local.
Por ejemplo, el año pasado, por incidentes similares en el Clásico del Astillero en el Capwell, Emelec recibió una multa de USD 82.260 y fue sancionado con un partido como local a puerta cerrada.

En este año, Emelec ha acumulado USD 10.675 en multas por el mal comportamiento de su hinchada en los partidos de la LigaPro en el estadio George Capwell.
Hasta el momento, la multa más alta se dio en la Fecha 10, ante Técnico Universitario, cuando el 'Bombillo' recibió una sanción de USD 3.600 por el encendido de objetos pirotécnicos en 12 ocasiones y el lanzamiento de dos objetos, sin impacto, a la cancha.
Durante esta temporada, Emelec ha sido sancionado en dos ocasiones con el cierre de una localidad de su estadio, ambos por el lanzamiento de objetos con impacto.
El primero fue tras el partido ante Vinotinto, por el que se cerró la platea alta de la general de la Avenida Quito por una fecha, mientras que, tras el encuentro ante IDV, se ordenó el cierre de la platea baja de la misma general. En este último cotejo, un objeto alcanzó la cara del futbolista Junior Sornoza.
Hasta el momento, la dirigencia de Emelec no se ha pronunciado al respecto de los incidentes del Clásico del Astillero, mientras que el acta de sanciones de la LigaPro saldrá en los próximos días.
"Quien hace estos desmanes no entiende que, más allá de un resultado deportivo, el perjuicio es únicamente para su club y no solo hoy. ¿Quién pierde si cierran el estadio? El club. ¿Quién pierde por las multas? El club. Qué pena", escribió Miguel Ángel Loor, presidente de la LigaPro, en su cuenta de X.
Esta debería ser la oportunidad idónea para que sentar un precedente, un castigo ejemplar. Sin embargo, también es probable que, luego de la multa y alguna sanción, la situación continúe igual de violenta en el estadio George Capwell, donde la hinchada de Emelec es la que más asiste, pero es también la más problemática del país.

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