Yale abre su segunda isla en Ecuador y se aleja un poco de la nostalgia por sus candados
La centenaria marca Yale, conocida antaño por sus candados, se reinventa y apuesta fuertemente por las cerraduras inteligentes. La marca abre en Quito su segunda isla, tras la primera de Guayaquil.

Isla de la empresa Yale, especialista en cerraduras inteligentes, en el Mall El Jardín, en Quito.
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PRIMICIAS
Autor:
Santiago Ayala Sarmiento
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Las marcas internacionales continúan abriéndose espacio en el mercado ecuatoriano. En los dos últimos dos años, varias de estas han ingresado en diferentes segmentos: Starbucks, Krispy Kreme, Wetzel's Pretzels, Banana Republic, El Ganso, etc.
Y ahora Yale, la centenaria marca de cerraduras, originada en Estados Unidos en 1868, y reconocida mundialmente a lo largo de la historia por sus candados, abre su segunda isla en Ecuador, que se enfoca en mostrar su reinvención hacia las cerraduras inteligentes.
Según registro de la Superintendencia de Compañías, en Ecuador están activas cinco empresas cuya actividad está catalogada como "Fabricación de candados, cerraduras, pasadores, llaves...". Entre todas, los ingresos por ventas ascendieron a USD 7,5 millones en 2024.
Mientras que las empresas que se dedican a la "Venta al por mayor de artículos de ferreterías y cerraduras...", sumaron ventas por USD 1.443,3 millones en 2024.
En agosto de 2024, Yale abrió su primera isla en Ecuador, en Guayaquil, en el centro comercial San Marino. Y desde el 18 de septiembre de 2025 operará con su segunda isla en el Mall El Jardín, en Quito.
Según explica Julián Carrascal, gerente de Marketing y B2C de Yale para Latinoamérica, explica que la marca llega de la mano del grupo sueco ASSA ABLOY, que en agosto de 2000 adquirió Yale.
La historia de Yale se remonta a alrededor de 1840, cuando Linus Yale Sr., comenzó a diseñar y fabricar una serie de cerraduras de alta seguridad en su Yale Lock Shop en Newport, Nueva York.
"Él fue el inventor del candado y del mecanismo de los pines. Más de 185 después, tenemos todo un ecosistema digital, con aperturas de cerraduras digitales. Llevamos años haciendo seguridad y estamos muy metidos en le tema de la tecnología, ese es el foco principal de este tipo de islas", dice Carrascal.
La inversión aproximada es de USD 50.000 por cada isla. Las cerraduras digitales que se venden en los dos locales del país son de última tecnología. Nicole Garzón, jefa de tiendas de Latinoamérica para Yale, explica que estas se pueden abrir con código, con huella digital, con tarjeta y también desde el celular a través de la aplicación propia de la compañía.
"El mecanismo se puede operar desde desde cualquier parte del mundo, se controla la cerradura, se asigna códigos para invitados, se reciben notificaciones si se intenta vulnerar la seguridad. Y los precios oscilan entre los USD 150 y 600, en una amplia gama para todo tipo de usuario.
Carrascal asegura que la expansión apunta a ubicar islas en otros centros comerciales de las principales ciudades del país. "En Ecuador nos habíamos quedado un poquito. Los recuerdos de la marca la tienen los abuelos, pero la gente joven no. Y con el montaje de estas islas, nuestra estrategia apunta a llegar a un público nuevo, eso es lo que buscamos".
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