Habría que talar 400 hectáreas del frágil bosque del Parque Llanganates para levantar una carretera, alerta estudio
Unos 80 kilómetros de la vía Salcedo-Tena cruzarían el Parque Nacional Llanganates, un importante humedal reconocido a nivel internacional. Pese a eso, los prefectos presionan para declarar la obra 'de interés nacional' e iniciar su construcción.

Lagunas en el Parque Nacional Llanganates. Foto de octubre de 2025.
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La biodiversidad del Parque Nacional Llanganates, con una extensión 219.000 hectáreas que atraviesan la cordillera oriental y descienden hacia la Amazonía ecuatoriana, podría estar en riesgo si se pone en marcha el proyecto de la vía Salcedo-Tena, según un estudio ambiental, presentado este 21 de octubre en Quito.
Esta carretera, en la que se proyectan alrededor de 120 kilómetros de longitud, de los cuales 80 km. cruzarían este parque nacional, es una obra que viene impulsando la Prefectura de Cotopaxi, con apoyo de otros gobiernos provinciales.
Las autoridades de las Prefecturas de la zona centro del país (Cotopaxi, Chimborazo, Pastaza, Bolívar y Napo) solicitaron el 22 de agosto de 2025 al Presidente de la República, Daniel Noboa, que ese proyecto se declare como 'obra vial de interés nacional'.
Según un oficio enviado por el viceministro de Infraestructura, Alex Villacrés, a la Presidencia, el pasado 19 de septiembre, la declaratoria de interés nacional dependerá de que el Ministerio de Ambiente y Energía emita su pronunciamiento sobre la viabilidad ambiental para la construcción de esta vía. El Viceministro solicitó el pronunciamiento de Ambiente desde julio de 2025.
"No hay nada (de avance). El Gobierno debe declarar prioridad nacional para empezar", respondió la prefecta de Cotopaxi, Lourdes Tibán, a PRIMICIAS al ser consultada sobre los avances de este proyecto.
¿Qué dice el estudio ambiental?
En el Parque Nacional Llanganates coexisten 10 ecosistemas, entre ellos, selvas tropicales, bosques nublados y páramos, albergando una biodiversidad excepcional, destaca el estudio 'Proyecto vial Salcedo-Tena: Impactos Potenciales en la Biodiversidad y Comunidades del Parque Nacional Llanganates', liderado por la Fundación Ecosistemas en Acción (Eco-Acción).
Además, por su posición geográfica posee una red de lagunas y turberas (tipo de humedal), de 30.355 ha, declarada como un humedal de importancia mundial, según la Convención de humedales Ramsar.
Este humedal, que almacena más de 1.000 toneladas de carbono por hectárea, abastece de agua potable y de riego a cantones como Salcedo, Latacunga y Píllaro. También alimenta al sistema hidroeléctrico Pisayambo – Agoyán.
Según el estudio ambiental, la carretera Salcedo-Tena, que cruzaría de forma transversal esta área protegida, plantea "riesgos considerables para la integridad ambiental y la seguridad hídrica de la región".
El trazado de la carretera, que cruza unos 80 km. de bosques primarios y páramos, ocasionaría la pérdida directa de bosque de unas 400 hectáreas, debido a la deforestación que requeriría la construcción de la vía.
Ese es el efecto directo, pero también hay impactos indirectos, pues una carretera también provoca migración de pobladores a los alrededores de la vía, con lo que la deforestación indirecta alcanzaría las 1.300 hectáreas. Esta segunda deforestación suele darse a 60 metros a cada lado de la carretera, explica Juan Sebastián Paredes, director de Eco-Acción.
Abastecimiento de agua en riesgo
Otros posibles riesgos analizados en el estudio son:
- La fragmentación severa de alrededor de 6.300 hectáreas adicionales, que pondría en peligro hábitats clave del oso andino y el sapo jambato. La fragmentación es la pérdida de conectividad e integridad de los ecosistemas y, en consecuencia, pérdida de biodiversidad.
- Más del 60% del trazado está en pendientes superiores a 25°, lo que exige la construcción de muros de contención y rellenos, lo que elevaría los costos del proyecto y aumentaría los impactos ecológicos y el riego de derrumbes.
- La vía afectaría a cinco subcuencas (ríos Pastaza, Anzu, Napo) y el sistema hidroeléctrico Pisayambo–Agoyán. El aumento de sedimentos y deslizamientos podría amenazar el abastecimiento de agua para más de 70.000 personas y la generación eléctrica en la Sierra centro-norte.
- El parque Llanganates provee agua potable, regula el clima y previene inundaciones. Pero estos servicios ecosistémicos podrían estar en riesgo con la construcción de la vía Salcedo-Tena, al poner en peligro unos 10 millones de toneladas de carbono.
- Las nuevas carreteras suelen atraer invasiones de tierra, caza furtiva y actividades extractivas, facilitando el acceso de la minería ilegal.
Como conclusión, el estudio recomienda detener el proyecto Salcedo-Tena, puesto que supone un "riesgo alto, costoso e irreversible para los valores naturales y sociales del Parque Llanganates".
Daniela Rosero López, ingeniera ambiental de la Universidad San Francisco de Quito, subrayó que Ecuador debe adaptar el desarrollo a las condiciones ambientales, lo que requiere de innovación. "Este proyecto creará un hueco en este sistema, que causará un desequilibrio global", dijo Rosero en un lanzamiento previo del estudio para la prensa.
Expedición preliminar de los GAD
En julio de 2024, varias autoridades hicieron un recorrido por parte de la zona donde se prevé levantar la vía.
Luego, entre el 18 y el 25 de noviembre de 2024, la Prefectura de Cotopaxi y el Municipio de Salcedo llevaron adelante una expedición preliminar en el Parque Nacional Llanganates, con el fin de determinar la viabilidad técnica del trazado para la conectividad de los cantones Salcedo, en la provincia de Cotopaxi, y Tena, en Napo.
El informe de la expedición, al que tuvo acceso PRIMICIAS, recomienda realizar un "estudio de línea base ambiental exhaustivo" como etapa inicial para la apertura de la vía, en el que se identifiquen y caractericen los componentes ambientales de la zona, tales como biodiversidad, recursos hídricos, clima y factores socioculturales, así como posibles áreas de influencia.
Además, señala que los estudios de prefactibilidad y factibilidad del proyecto deberán incluir estudios hidrológicos detallados. "Esto garantizará que las soluciones propuestas sean sostenibles y efectivas frente a eventos extremos y cambios en el régimen hidráulico", dice el informe, con el que se pretendía activar la fase de estudio de prefactibilidad.
En las conclusiones del informe advierten que las características observadas en los caudales sugieren que, en épocas de lluvias abundantes, los ríos pueden superar sus márgenes actuales, lo que incrementaría el riesgo de desbordamientos. Por ello, enfatizan en la necesidad de implementar obras civiles de paso de agua y sistemas de drenaje complementarios.
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