En el febrero más lluvioso en 27 años, Guayaquil recibió agua equivalente a 89.000 piscinas olímpicas
Las precipitaciones duplicaron el promedio del mes y se acercaron a niveles del histórico fenómeno de El Niño de 1998. El Comité Erfen mantiene bajo monitoreo un episodio de La Niña Modoki.
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Guayaquil vivió en febrero de 2025 un diluvio sin precedentes en casi tres décadas. Las lluvias históricas duplicaron los niveles normales de precipitación mensual y la ciudad registró el febrero más lluvioso de los últimos 27 años.
Según el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), la estación meteorológica del aeropuerto, que cuenta con registros históricos desde hace 45 años, terminó el mes con un acumulado de 644,8 milímetros de lluvia (litros por metro cuadrado).
Febrero de 2025 solo fue superado por los febreros de 1987 (753,3 mm) y 1998 (721,1 mm), ambos marcados por eventos históricos del fenómeno de El Niño.
La concesionaria de agua potable y alcantarillado Interagua informó este 5 de marzo de 2025 que los sistemas de drenaje pluvial soportaron el mes pasado un acumulado de 222,3 millones de metros cúbicos de lluvia.
Es decir, en Guayaquil llovió a lo largo del mes el equivalente a 1.601 edificios The Point, el rascacielos más alto de la urbe, de 135 metros de altura, según Interagua. El volumen de agua que cayó sobre la ciudad sería suficiente para llenar casi 89.000 piscinas olímpicas.
¿Cómo ha respondido el drenaje?
El sistema de alcantarillado de aguas lluvias de Guayaquil trabaja al límite y en general ha respondido de mejor forma respecto a etapas lluviosas menos intensas, de acuerdo a la evaluación de la Empresa Pública Municipal para la Gestión de Riesgos y Seguridad (Segura EP).
Interagua destacó que el denominado plan choque de limpieza de sistemas y canales de drenaje, además de lo invertido en la prevención de El Niño 2024 -que resultó débil-, han contribuido a mitigar los efectos de lluvias históricas.
"Ha sido un febrero muy lluvioso. El de 2025 se ubicó como el tercer febrero con más precipitaciones en la historia de Guayaquil, solo detrás de los de 1987 y 1998".
Carlos Naranjo, técnico del Inamhi.
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Pero en sectores críticos -zonas bajas y con problemas de diseño del drenaje pluvial- las inundaciones son persistentes y las calles se siguen convirtiendo en ríos o en lagunas de aguas empozadas que tardan horas en bajar de nivel.
Sectores con inundaciones crónicas
La avenida Barcelona, al oeste de la ciudad, sufrió inundaciones la mañana de este 5 de marzo y aunque en un sector el agua comenzó a disminuir tras el trabajo de cuadrillas de Interagua, en la intersección con la avenida Velasco Ibarra (bajos del puente de la 17) el problema se extendió toda la mañana.
La poza que cubría el nivel de las aceras, y provocó una retención de tránsito vehicular en el lugar, se ubica al borde del Estero Salado, que alcanzó la marea máxima (pleamar) a las 11:15, otro de los condicionantes que limitan la rápida evacuación de las aguas, según las autoridades.
En la calle Roberto Costa Prats, de Sauces 6 (al norte), el problema atribuido al diseño del alcantarillado en un sector bajo se ha vuelto crónico. Alrededor de 500 metros de vía y los callejones aledaños soportan inundaciones a diario desde hace tres semanas.
Betsy Coveña, de 42 años y vecina de Sauces 6 por décadas, tiene que caminar por una poza de agua estancada y maloliente abajo de la rodilla, para salir de su casa a diario en la manzana 319 de la ciudadela. El el lugar se estudia la instalación de válvulas reguladoras de marea.
"Llevamos 15 días con esto. Si no llueve, el nivel baja un poco de tarde o en la noche, pero basta una llovizna para que todo vuelva a subir. Y esto es agua maloliente rebosada de las alcantarillas, no solo lluvia”, indicó Coveña, que atraviesa con su hijo los 100 metros de un callejón inundado.
¿Cómo será marzo?
La configuración del fenómeno de La Niña Modoki estaría intensificando las precipitaciones en Ecuador, unido a factores atmosféricos.
Se trata de una variante menos conocida de La Niña convencional (o canónica), de la que se esperaban lluvias deficitarias como las de enero y un océano frío, pero que provocó un rápido aumento de la temperatura del mar en las costas de Ecuador desde inicios de febrero.
El Comité Nacional para el Estudio Regional del Fenómeno de El Niño (Erfen) confirmó el pasado 19 de febrero que mantiene bajo evaluación un episodio de La Niña Modoki. El término Modoki significa en japonés “lo mismo pero diferente”, como si La Niña “pareciera pero no es”.
El pronóstico:
- El Inamhi tiene activa una alerta meteorológica hasta este viernes 7 de marzo con lluvias de nivel alto y muy alto en buena parte del país. Además, se prevé un mes de marzo de un nivel entre "normal a lluvioso", es decir por encima del promedio.
- El Comité Nacional para el Estudio Regional del Fenómeno de El Niño (Erfen) prevé emitir un pronóstico definitivo en un nuevo boletín oficial, este jueves 6 de marzo de 2025.
- A nivel global, los pronósticos indican que las condiciones de La Niña, catalogada como débil, persistirán durante el trimestre febrero-marzo-abril, pero podrían comenzar a dar paso a condiciones neutras en el trimestre marzo-abril-mayo. En Ecuador, las perspectivas son que las condiciones neutrales se alcancen también en este trimestre, con una probabilidad superior al 50%.
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