El SNAI planea intervenir en la infraestructura de 46 prisiones

Un total de 65.971 ítems de materiales para el adecentamiento y las reparaciones de las prisiones del país, busca comprar el Servicio de Atención Integral a Personas Privadas de la Libertad (SNAI).

El proceso se lanzó el 16 de mayo de 2022 y hasta el 2 de junio está abierto el plazo para la recepción de las ofertas técnicas. Se espera que la adjudicación se concrete el 24 de junio. Aunque, no se conoce el valor que el Gobierno ha presupuestado para la compra.

La Unidad de Infraestructura del SNAI identificó los materiales requeridos para reparar las cárceles. Según los documentos oficiales del proceso, los ítems se dividieron en ocho áreas.

Según el SNAI, en este contrato se excluyeron los materiales que forman parte de otros procesos que están considerados en la planificación anual inicial.

Por ejemplo, en el Plan Anual de Contrataciones de 2022, la entidad planeó USD 8,8 millones para obras de infraestructura relacionadas con la seguridad.

En total se plantea hacer 15 obras, pero solo una será por gasto corriente, lo que significa que está garantizada. Se trata del mantenimiento en la Cárcel de Turi, en Cuenca, por USD 10.607.

Las otras 14, en cambio, dependerán de los fondos de inversión disponibles. El 68% del monto destinado a obras está asignado a la Penitenciaría del Litoral. Esta fue la más dañadas en los desmanes ocurridos en 2021.

Sin embargo, hasta el 1 de junio de 2022 la entidad no ha empezado ninguno de esos procesos.

La compra de los materiales es la primera contratación, relacionada con la infraestructura de las prisiones, que inicia desde que se desató la crisis carcelaria que ha dejado más de 300 muertos. Además de daños importantes en la infraestructura de las cárceles.

El 'Top 10'

Según la planificación del SNAI, el 43% de los materiales que se va a comprar será distribuido entre 10 prisiones. Estas no son necesariamente las más grandes o con más detenidos.

Por ejemplo, en esta lista no está la cárcel de Turi (Azuay) y la cárcel de Latacunga (Cotopaxi) es la que menos materiales recibirá en esta primera compra.

Los materiales que más se comprarán en este proceso son para iluminación e instalaciones eléctricas, además de baterías e instalaciones hidrosanitarias.