¿Qué le falta a Quito? Cinco grandes deudas que persisten a 491 años de su fundación
La capital celebra un nuevo aniversario con su patrimonio histórico como emblema, pero también con urgencias visibles: violencia, caos vial, poca planificación y un modelo institucional que ya no sostiene a una ciudad metropolitana de casi tres millones de habitantes.

Vista aérea de Quito, 21 de octubre de 2025
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Andrés Salazar / Primicias
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Quito cumple 491 años de fundación española en medio de festejos, ferias, desfiles y eventos culturales. La ciudad, declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, conserva uno de los centros históricos mejor preservados de la región.
Pero, más allá del encanto patrimonial y la vida festiva, la capital arrastra problemas profundos que siguen esperando soluciones.
Los datos oficiales lo evidencian, sobre todo, en dos áreas críticas: movilidad y seguridad.
Entre enero y octubre de 2025, en Quito se registraron 213 homicidios intencionales, un ligero incremento frente al mismo periodo de 2024. Además, la Fiscalía recibió 12.106 denuncias por robo, con marzo como el mes más crítico.
La movilidad también muestra señales de colapso: la AMT reporta 3.137 siniestros de tránsito en los primeros 10 meses del año, con 249 fallecidos y casi 2.000 lesionados.
PRIMICIAS habló con concejales capitalinos y representantes del sector privado para responder una pregunta clave: ¿qué le falta a Quito? Estas son las cinco deudas más urgentes que identifican.
1. Seguridad: la preocupación transversal

Este 2025, la violencia mortal en Quito ha crecido. Entre enero y octubre de 2025 se reportaron 213 homicidios intencionales, más en comparación con el mismo periodo del año anterior (209).
Uno de los casos más recientes sacudió al sur de la ciudad: el 25 de noviembre, un estudiante de 16 años murió al ser agredido por sujetos desconocidos en los exteriores de un colegio ubicado en el sector de La Argelia, en el sur de la capital. Su madre relató, entre lágrimas, que encontró a su hijo agonizando.
El 14 de noviembre, un ataque armado contra una barbería en el sector Las Cuadras (Quitumbe) dejó muerto a un niño de 8 años. En menos de una semana se registraron al menos dos balaceras a centros estéticos, lo que ha reactivado la alarma ciudadana, especialmente en barrios populares.
Tanto autoridades como gremios coinciden en que la seguridad sigue siendo la principal necesidad de Quito.
“Sin duda, a Quito le falta seguridad”, afirma el concejal correísta Emilio Uzcátegui, al considerar que la percepción de riesgo afecta la vida cotidiana, el comercio y la reactivación turística. Desde el sector privado, Diego Vivero, director de la Confederación de Restaurantes del Ecuador, añade que la falta de actividad en el espacio público también contribuye a generar sensación de inseguridad.
“Si la ciudad no se dinamiza y no hay gente en las calles, todo se siente más inseguro”, dice.
2. Seguridad vial y movilidad ordenada

La emergencia vial en Quito se manifiesta con cifras dramáticas: entre enero y octubre de 2025 la capital registró 3.137 siniestros de tránsito, con 1.998 personas lesionadas y 249 fallecidos.
Las dos arterias principales que están en el ojo del huracán son la avenida Simón Bolívar y la Ruta Viva. En 2025, la Simón Bolívar ya ha acumulado 296 accidentes y 24 fallecidos.
Un episodio reciente que enfatiza la gravedad del problema ocurrió el 30 de octubre en la Ruta Viva: un choque múltiple entre un tanquero, vehículos particulares y una motocicleta dejó al menos tres muertos y siete heridos.
Para Uzcátegui, se trata de un problema cultural y estructural: “A Quito le falta seguridad vial y responsabilidad ciudadana. No tiene idea cuán problemático puede resultar eso”.
El concejal Michael Aulestia, de la Alianza Reto - Va Por Ti, coincide en el diagnóstico pero enfatiza en la falta de planificación: la ciudad opera con múltiples entidades desconectadas (Secretaría de Movilidad, AMT, Epmmop, Empresa de Pasajeros y Metro de Quito), sin una autoridad única de tránsito, lo que dificulta implementar políticas integradas.
3. Planificación y decisión política

La ausencia de planificación, ordenamiento y decisiones firmes se hace visible ante la falta de proyectos emblemáticos recientes.
A pesar de que el actual gobierno municipal —bajo la administración del Pabel Muñoz— cuenta con mayoría en el Concejo, las críticas se acumulan: hasta ahora no se ha ejecutado una obra de gran impacto que refleje un avance visible para los quiteños más allá del Metro de Quito, cuya construcción inició en otras administraciones.
Además, en los últimos años se sumaron conflictos en procesos de contratación: por ejemplo, un polémico contrato para platos de hornado por USD 15, que terminó siendo suspendido por las decisiones de la propia autoridad municipal.
Los tres entrevistados recalcan que Quito ha perdido la capacidad de planificar y ejecutar.
Aulestia es directo: “Esta ciudad ha retrocedido. Le falta planificación, ordenamiento y decisión”.
Dice, además, que los grandes instrumentos de planificación —como el Plan Maestro de Movilidad o el Plan de Desarrollo y Ordenamiento Territorial— han quedado en letra muerta, y que la baja ejecución presupuestaria, inferior al 50% hasta octubre, evidencia falta de gestión.
Vivero añade que esta improvisación se refleja incluso en las fiestas de ciudad: “Se ha optado por hacer 200 o 250 eventos sin un eje central. Quito necesita un evento mayor, planificado, que convoque y que marque identidad”.
4. Identidad, tradición y sentido de ciudad

Más allá de la modernización —necesaria—, Quito sigue contando con un centro histórico invaluable, una arquitectura colonial que atrae turistas y riqueza cultural heredada; sus casas, iglesias centenarias y calles empedradas son emblemas de su historia como ciudad andina.
Sin embargo, autoridades consultadas coinciden con ciudadanos en que ese patrimonio simbólico no ha sido acompañado por una agenda cultural integral que permita fortalecer una identidad renovada, plural y coherente con una metrópoli actual.
La nostalgia del “Quito de antaño” convive con una ciudad diversa, llena de migrantes internos y externos, con dinámicas urbanas propias de una capital latinoamericana moderna.
Tanto Uzcátegui como Aulestia apuntan a una pérdida progresiva de identidad.
Para Uzcátegui, Quito necesita “una nueva conciencia de ciudad global”, más inclusiva y cosmopolita, que reconozca lo que significa vivir en una metrópoli diversa.
Aulestia, en cambio, enfatiza en recuperar las tradiciones: “A Quito le falta identidad. Los quiteños ya no reclaman ni promueven lo que somos. Sin historia, no sabemos hacia dónde vamos”.
5. Infraestructura y modernización institucional

Uno de los reclamos más persistentes en Quito es el mal estado de las vías, la presencia de baches, el deterioro del pavimento y la falta de mantenimiento, que afecta no solo la estética urbana, sino la seguridad de peatones, ciclistas y conductores.
Esa precariedad se ha convertido en el “talón de Aquiles” de varias administraciones municipales recientes. La capital cuenta con cerca de 8.500 kilómetros de vías, con más de 11.000 calles, aproximadamente el 60 % todavía necesita mantenimiento.
La carencia de inversión visible, sumada a una ejecución presupuestaria que en 2025 no alcanza ni el 50% en materia de inversión, ha generado frustración en sectores ciudadanos que esperan no solo promesas, sino obras concretas.
La falta de inversión y la poca modernización administrativa también pesan.
Entre vías deterioradas, huecos, demoras en obras y ausencia de proyectos emblemáticos —más allá del Metro—, la ciudad muestra señales de estancamiento.
Aulestia cuestiona que Quito no haya impulsado un estatuto autonómico ni modelos modernos de gestión territorial, como alcaldías menores electas. “El municipio ya no soporta el modelo de ciudad que tenemos con administraciones zonales que son distantes a las necesidades de los habitantes”, afirma.
Uzcátegui, por su parte, recuerda que el Gobierno central mantiene una deuda de USD 140 millones con el Municipio, recursos clave para obras y mantenimiento.
Las cinco palabras que resumen lo que le falta a Quito
Cada entrevistado sintetizó sus prioridades en cinco conceptos. También se consultó con ciudadanos quienes coincidieron en estas palabras:
A Quito le falta:
- Seguridad
- Seguridad vial
- Ordenamiento
- Tradiciones
- Vialidad
Quito, también llamado "Edén de maravillas" o "La Carita de Dios", llega a su aniversario 491 entre música, colores y memoria, pero también con el desafío de mirarse en el espejo y enfrentar sus déficits.
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