"Uno de los sectores más corruptos es el de la salud", dice la vicepresidenta de Ecuador María José Pinto

En medio de la crisis de pacientes sin medicinas en hospitales públicos, la vicepresidenta de Ecuador, María José Pinto, promete que el desabastecimiento de fármacos se solucionará en el primer trimestre de 2026, y reconoce que es uno de los temas prioritarios del "complicado" sistema de salud público actual.

Pinto, encargada también del Ministerio de Salud Pública por decreto presidental, señaló en una entrevista con EFE que hubo una compra emergente, centralizada y "transparente" de medicinas, principalmente de aquellas de alto consumo. 

Entre los medicamentos a los que se dará prioridad mencionó productos para la presión arterial, insulina, paracetamol, anestésicos para cirugías, y hasta fentanilo, un fármaco esencial para las operaciones. 

"Una de las cosas que tenemos que comprar es fentanilo, por ejemplo, y la última vez que compramos (...) hubo dos sobredosis de doctores con fentanilo".

María José Pinto, vicepresidenta de Ecuador. 

De acuerdo con Pinto, el dilema que aqueja a la salud pública desde hace varios años es una "problema de gestión, una gestión que se ha venido haciendo mal". 

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"Hay más de 136 sistemas en el Ministerio de Salud, que ninguno se conversa con el otro", se lamentó al recordar un caso en el que perdieron tres días en localizar en el norte del país un medicamento que requerían en el sur.

El problema de la corrupción 

En su entrevista, Pinto también mencionó la "crisis de infraestructura", al señalar que existen más de 2.000 establecimientos de salud en los que se debe invertir, y auguró la participación del sector privado en ese ámbito.

"Tenemos una crisis en que salen más doctores graduados de los que podemos contratar en el Ecuador y solo el 40 % de las enfermeras pasan el examen para poder ejercer". 

María José Pinto, vicepresidenta de Ecuador. 

Si bien Pinto evitó referirse a la situación del sistema sanitario de Ecuador como una crisis generalizada, lamentó que la corrupción persiste en varios de los procesos. 

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"Uno de los sectores más corruptos es el de la salud, en general", anotó, aunque luego matizó sus palabras y dijo que "no todo está mal", pues hay "maravillosos doctores" y "gente maravillosa que trabaja dentro del Ministerio de Salud".