Venezuela se debate entre la duda de una intervención militar de Estados Unidos y la represión del chavismo
Aunque el despliegue de buques estadounidenses en el mar Caribe es el tema del momento en Venezuela, entre los ciudadanos no hay consenso: unos rechazan una eventual invasión y otros la ven como la única salida al régimen de Nicolás Maduro.

Vista panorámica de la Plaza Venezuela , en Caracas, el 21 de agosto de 2025.
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Para PRIMICIAS
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redacción Primicias, desde Caracas
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CARACAS, VENEZUELA.- Es el tema de conversación del momento. Se habla en voz baja en sitios públicos, pero también a viva voz como lo hizo un señor que el viernes 22 de agosto de 2025 se movilizaba en una unidad de transporte público en Caracas y discutía con otro sobre la posibilidad de una intervención militar estadounidense en Venezuela.
El tema vuelve a la palestra después de la movilización de buques de guerra, infantes de Marina y otros equipos tácticos que Estados Unidos desplaza hacia el mar Caribe en lo que el gobierno de ese país define como una lucha contra el narcotráfico.
Los dos hombres iban en un colectivo en la ruta Carmelitas-Petare, en el corazón de Caracas. Mientras uno exponía los riesgos al otro de una posible invasión o ataque directo, el otro respondía que era la única forma de garantizar el futuro de las siguientes generaciones.
“Uno cuando va a morir, muere cómo sea... Ahora agárrense, no hay arreglo, si no se llevan a estas lacras nuestros hijos, nuestros nietos van a vivir con esas lacras (término despectivo en Venezuela para referirse a una persona dañina), que son las peores basuras que he conocido en mis 54 años”, aseguraba sin temor sentado junto a su compañero.
Analista descarta invasión militar
Sin embargo, la posibilidad de una operación de esta naturaleza no está tan clara para el analista político de la firma Fábrica Política, David Rico, quien dijo a PRIMICIAS que, a diferencia de su primer gobierno, Donald Trump ha declarado a Nicolás Maduro como “el enemigo número uno” de Estados Unidos, con lo que eleva el costo político para el líder chavista mientras se mantenga en el poder en Venezuela.
“El escenario actual, en comparación con el año 2020, es de una escalada superior, porque coloca a Maduro como el verdadero enemigo de Estados Unidos, quien a su vez tiene una posición más frontal y directa contra Trump”, subrayó.
El gobernante ha convocado reuniones durante toda esta semana en las que llamó a movilizar 4,5 millones de milicianos, una especie de cuerpo cívico-militar que conforman reservistas y personas de la tercera edad. Elevó el listón el jueves 21 de agosto cuando llamó a un alistamiento para este componente de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) para los días sábado 23 y domingo 24 de agosto de 2025.
Este viernes 22 de agosto -en un acto en el que lo acompañó el alto mando militar, los poderes públicos que responden a sus órdenes, los partidos de la oposición cooptada por el chavismo y hasta los gremios empresariales y comerciales del país- recordó la proclama del presidente Cipriano Castro, aquel gobernante que entre 1902 y 1903, enfrentó un bloqueo naval de las potencias extranjeras de Alemania, Inglaterra e Italia por el impago de la deuda externa venezolana.

Más allá de esos simbolismos o de la capacidad o el número de los milicianos, Rico resalta que el Ejército, el principal sostén de Maduro en el poder, sí tiene adiestramiento militar, cuenta con armas y equipamiento que pudiera hacerle frente a una invasión que ve lejana.
Primero porque Estados Unidos entraría en una franca violación de la carta de Naciones Unidas y segundo porque al hablar de 4.000 marines para llevar al Mar Caribe, no es ni la cuarta parte que ese país empleó en Panamá cuando depuso a Manuel Antonio Noriega del poder en 1989.
En su primer gobierno, Trump apoyó a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela y lo que se conoció como la política de “la máxima presión” o todas las “cartas están sobre la mesa” no pasó de retórica, aunque sí hubo sanciones económicas que contribuyeron a llevar la producción petrolera del país a mínimos históricos.
Maduro eleva el tono

Maduro en ese momento hablaba de la “diplomacia de la paz”, pero ahora responde con despliegues de tropas civiles y lo que llama “la unión cívico-militar-policial” ante lo que su gestión considera una amenaza a la soberanía del país.
Estados Unidos, tras el canje de 10 prisioneros estadounidenses en Venezuela por los 252 migrantes que estaban presos de forma injusta en El Salvador, no se quedó atrás. Declaró al Cartel de los Soles como una organización terrorista, subió la recompensa por la captura de Maduro de USD 25 a USD 50 millones, la cifra más alta que ofrece por una persona que considera es una amenaza para la soberanía de su país y en los últimos días voceros como el director de la DEA dijo que Venezuela se había convertido en el mayor “cartel de las drogas del mundo”.
Terry Cole dijo en una entrevista en Fox News que con Maduro a la cabeza el país pasó a ser "un Estado narcoterrorista que sigue colaborando con las FARC y el ELN de Colombia para enviar cantidades récord de cocaína" a los carteles mexicanos, que "siguen entrando en Estados Unidos".
La ofensiva de Trump contra el narcotráfico, desde que volvió en enero de 2025 a la Casa Blanca, lo llevó a designar a los carteles mexicanos y a la banda criminal de origen venezolano Tren de Aragua como organizaciones terroristas. Similar suerte corrió el Cartel de los Soles, un grupo al que puso a Maduro como líder y a otros altos cargos de su gobierno como Diosdado Cabello, su mano fuerte para la represión interna; y al ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, quien está al frente de esa cartera desde hace más de un lustro.
"Lo que amenazan con intentar hacer contra Venezuela, un cambio de régimen, un zarpazo terrorista, militar, es inmoral, criminal e ilegal", alzó la voz Maduro el viernes 22 de agosto en cadena nacional.
Caracas se paró, pero por un apagón eléctrico

Pero la gente en el país sigue su vida. Caracas se paralizó este viernes por unas tres horas ante las fuertes lluvias en el país. Las descargas eléctricas provocaron una falla en una subestación de la ciudad y hasta el Metro, el principal sistema de transporte subterráneo de Venezuela, dejó de operar en ese lapso.
Algunos llegaron a pensar, comentaron en una reunión de cumpleaños ya entrada la noche, que la falla eléctrica estaba asociada esa posible y esquiva intervención, algo que las autoridades -como en pocas ocasiones- se apresuraron a desmentir a través de un comunicado.
En las calles de Caracas, más hacia el centro o el oeste, sí hay una movilización de funcionarios de cuerpos de seguridad desde finales de julio. Al término de las elecciones municipales del 27 de julio, Padrino López anunció que el despliegue militar y policial en la capital del país se mantendría.
Una periodista de un medio digital independiente venezolano lo ha experimentado en carne propia. Fijó hace tres semanas una reunión con la madre de un preso político para una entrevista. Se citaron en un parque público, Los Caobos, en el centro de la ciudad. Sin embargo, al llegar al sitio e intentar comenzar la grabación en la zona había funcionarios policiales con armas largas y capuchas que daban rondas por el lugar. La entrevista se pospuso ante la aprehensión de la entrevistada y los encargados de la producción.
Esta semana cuando la misma periodista hacía deportes en el sector El Calvario, al oeste de Caracas, se topó con otros dos miembros de cuerpos de seguridad. Esta vez de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), uno de los organismos señalados de las más graves violaciones de derechos humanos contra presos políticos, lo que incluye torturas, tratos crueles, inhumanos y degradantes, así como casos de ejecuciones extrajudiciales.
Son tan comunes en las últimas tres semanas estos escenarios, que la periodista dijo que ya las personas los “asimilaron al paisaje” de la ciudad, donde los más osados se burlan de ellos.
El panorama no es tan diferente en redes sociales donde las personas pasan del alarmismo o la desinformación sobre la intervención a hacer bromas sobre la llegada de los marines estadounidenses y de la escasa preparación táctico-militar que la atribuyen a los milicianos.
Posible fractura interna del chavismo

Para Rico, toda esta presión de Estados Unidos busca que haya un posible quiebre interno o fractura en las alianzas chavistas que permitan un cambio interno sin necesidad de una intervención extranjera. En ese campo los rumores van y vienen; uno de los últimos fue el del ex vicepresidente del fallecido Hugo Chávez y excanciller de Maduro, Elías Jaua, quien después de estar en las altas esferas del poderío chavista fue marginado en los últimos años.
Aunque se habló de que estaba en la clandestinidad, el viernes 22 de agosto en un post de Instagram ,salió en defensa de Nicolás Maduro. Definió lo que ocurre como una “guerra psicológica” contra la población y agradeció la solidaridad de los países afines al chavismo agrupados en la Alba.
“Ya el 28 de julio de 2024 se hablaba de profundas diferencias dentro del chavismo, que de hecho el proceso electoral podría unirlos de nuevo, pero en esta oportunidad pareciera que sí existe aquellos que buscan liberación de economía, que tienen ideas más liberales en economía y política, que pudieran ser quienes generen esta fractura interna en el chavismo”, expresa Rico sobre una posibilidad cierta de posible quiebre interno.
En la oposición son más cautos. La persecución, encarcelamiento y los últimos operativos liderados por Diosdado Cabello -que en mayo mostró como un trofeo a Juan Pablo Guanipa, el exdiputado opositor que fue el más cercano a María Corina Machado tras las presidenciales de 2024- los mantiene en una especie de pausa o repliegue táctico.
"Hay un cerco estratégico para aislar el tráfico drogas y minerales"
La presidenta de Primero Justicia y exdiputada, María Beatriz Martínez, alcanzó a comentar a este medio que, dentro del seno de la Plataforma Unitaria Democrática, la mayor alianza opositora venezolana, no ha habido una discusión sobre el tema. Su actual secretario ejecutivo interino declinó comentar al decir que no estaba al tanto del despliegue militar estadounidense.
Solo Machado desde la clandestinidad mantiene su línea dura. Defiende, agradece y apoya las acciones de Donald Trump y dice que están preparados para una transición democrática, pacífica y constitucional en Venezuela al mantener que las elecciones presidenciales se las robó el chavismo.
Martínez explicó que Estados Unidos quiere “cercar al Cartel de los Soles”, razón que lo ha llevado a movilizar esos buques de guerra e infantes de Marina.
“Ello tiene como primer objetivo cortar el narcotráfico, el tráfico de oro y el cruce ilegal de petróleo que sale desde Venezuela. Estas acciones acarrean que las fuentes de financiamiento de quienes se sostienen a la fuerza en el poder en Venezuela se vean limitados al cortarle los ingresos a esa estructura criminal”, destacó.
Coincidió con Rico en que la presión militar frente a las costas del país podría producir una fractura, pero aseguró que también en el plano internacional pudiera verse un caso similar, pese a las advertencias y críticas de Brasil, Colombia, México y las potencias aliadas del chavismo como Rusia, China y hasta Irán, que mostraron su rechazo a estos escenarios.
La dirigente política recordó a la comunidad internacional que en este momento no se puede ser “neutral” ante “un régimen criminal” como el que se mantiene en el poder en Venezuela.
Una posición en la que el diputado electo a la Asamblea Nacional y ahora alejado de la Plataforma Unitaria Democrática, Henrique Capriles, no compartió al rechazar cualquier posibilidad de intervención extranjera en Venezuela.
“Venezuela no necesita más conflictos externos, internos, ni retóricas que generan miedo y zozobra”, afirmó en un comunicado, aunque la realidad sea contraria mientras que los funcionarios de Trump y Maduro se enzarzan en una guerra de acusaciones y descalificaciones.
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