El poder transformador de las ciencias computacionales

La conectividad a Internet de las personas como de los objetos cotidianos generan una cantidad inimaginable de datos que alimentan los algoritmos que soportan la inteligencia artificial (IA). Así, podemos considerarnos privilegiados al ser testigos de un cambio radical en el funcionamiento del mundo propulsado por la IA y las ciencias computacionales.

Si bien, las fronteras tecnológicas se eliminan en cuanto al acceso y costo, no sucede lo mismo con el acceso al conocimiento. Esta realidad obliga al profesional, a no quedarse en la incertidumbre, sino a adentrarse al corazón de esta revolución, que late en gran parte apoyado en las ciencias de la computación, para ser parte de los retos de la evolución.

Es así que, el desarrollo tecnológico, sin vuelta atrás, presiona al mercado laboral a contar con capital humano capaz de crear e innovar, en otras palabras, investigadores científicos.

La capacidad de proponer o contextualizar la implementación a la realidad de nuevas tendencias como: IoT, BigData, IA, Ciberseguridad, Cloud y Data Science. Áreas clave para tener grandes beneficios en la automatización de procesos y tareas, optimización de costos y tiempo.

Por ende, cada vez son más necesarios nuevos modelos, arquitecturas y optimización de técnicas, que lleven a responder problemas en todos los campos disciplinares, donde las ciencias computacionales han pasado a constituirse en una disciplina transversal.

Investigadores científicos que liderarán el mundo

En una sociedad de la información y del conocimiento, indiscutiblemente aparecen nuevas formas de pensamiento, que modifican los estilos de vida. Por tanto, la investigación científica deberá indagar en las necesidades específicas y contexto de la problemática del entorno social, profesional, industrial o académico.

En consecuencia, el desarrollo de las ciencias exige profesionales de la investigación para asegurar resultados de manera eficiente y confiable.

Aquí, el enorme desafío de las instituciones educativas, contar con líneas de investigación en los diversos campos del conocimiento, que apunten a los profesionales a ser líderes científicos, académicos y desarrolladores tecnológicos.

Lo interesante es que en Ecuador, la mayor producción científica tiene lugar en las ciencias computacionales. A través de instituciones que confían en el talento humano nacional e invierten en investigación. Este es el caso de la Universidad Politécnica Salesiana, UPS, que cuenta con su primer programa doctoral, el Doctorado en Ciencias Computacionales.

Este programa está dirigido a profesionales de la ingeniería, Matemática o Estadística con titulación de Maestría Académica con Trayectoria Profesional o Maestría Académica con Trayectoria de Investigación, en el campo de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC). Así como en Electrónica, Automatización y Sonido, Mecatrónica y

Telecomunicaciones.

Con amplia cobertura y modelo flexible

La UPS tiene presencia en Quito, Guayaquil y Cuenca; cuenta con 88 grupos de investigación y más de 180 PhDs. Sus laboratorios están dotados de tecnología de punta, que asegura una investigación de calidad, durante los ocho periodos que dura el doctorado.

En la sede matriz Cuenca, el Doctorado en Ciencias Computacionales se ejecutará en modalidad presencial. Tiene un esquema educativo flexible, a través de estancias intensivas durante quince días por semestre.

Para la investigación, los candidatos a PhD dispondrán de un tutor con experticia y experiencia en el campo científico para el acompañamiento y trabajo.

La UPS, con una trayectoria próxima a cumplir 29 años, es una institución de avanzada. Actualmente, se ubica como la sexta universidad ecuatoriana en producción científica en Ciencias de la Computación, según Scimago Institution Rankings.

Esto evidencia que, la institución asume con responsabilidad los desafíos del futuro para entregar a la sociedad profesionales que sean agentes de desarrollo. Anclarse al progreso de las ciencias computacionales y ser parte de los líderes que dirigirán al mundo, es cuestión de la toma de decisiones, de manera oportuna.