El ecuatoriano Michael Morales agradeció a su familia, a su equipo de trabajo y a la gente que lo apoyó desde Ecuador y México después de alcanzar un debut inmejorable en la cartelera estelar del UFC 270, en Estados Unidos.
Fue una noche mágica para Michael Morales. El luchador de 22 años consiguió su decimotercera victoria consecutiva, y de qué manera: por la vía del nocaut en el primer round.
"Quiero darle las gracias a mi academia, a todos quienes me han apoyado para esto. Gracias por confiar en mi trabajo. Me he sacrificado por esto y sé que Ecuador va a salir adelante", dijo el luchador.
Morales derrotó al estadounidense Trevin Giles, en la categoría wélter (77 kilogramos) del UFC 270, que se llevó a cabo en Anaheim, California.
En el único asalto arrancó parejo. Ambos peleadores estudiaron sus movimientos y fueron pacientes. Giles conectó el primer golpe, pero no hizo daño a Morales, a pesar de que el ecuatoriano fue derribado.
De inmediato, el nacido en El Oro, muy concentrado y aprovechado el alcance de su derecha, conectó un golpe al rostro de su rival, quien cayó al suelo y se vio totalmente superado. Allí el réferi detuvo la pelea por el ground and pound.
"Esperen más victorias para Latinoamérica entera, para Ecuador y México. Nos vamos para arriba, latinos", expresó Morales emocionado.