Si te gusta el arte y quisieras visitar el Louvre, el MoMa o el Prado, la virtualidad te ofrece un paseo por las grandes instituciones que albergan las colecciones más emblemáticas desde un dispositivo móvil. Sigue leyendo y conoce cómo son los museos virtuales y por qué son vitales en los procesos de aprendizaje.
La tecnología tiene el potencial de redefinir los museos, abriendo la oportunidad de nuevas formas de conectar con los visitantes. En la pandemia, los museos cerraron sus puertas y cancelaron las visitas presenciales. Como reacción, muchos museos se apresuraron a generar recorridos digitales por sus colecciones.
La creación y desarrollo de estas visitas a museos nació de la necesidad de continuar acercando el conocimiento que albergan estas instituciones. Hoy en día, un enfoque posible es crear experiencias híbridas que utilicen la tecnología digital capaz de enriquecer la visita física a los museos. En este contexto, la investigación “Redefining the Museum Experiences in the Virtual Age”, de PhD. Janio Jadán Guerrero, vicerrector de Investigación de la Universidad Indoamérica, aborda tres experiencias desarrolladas en el Ecuador:
- La Espiral de Propuesta de memoria del Museo Nacional del Ecuador (MUNA).
- La propuesta Animals of Yesterday and Today desarrollada del Smithsonian Museo Virtual.
- Museos Interactivos como Mediadores Pedagógicos, recursos educativos en entornos virtuales de aprendizaje.
Este estudio es importante porque sus experiencias concluyen que los museos son espacios de interacción que contienen una infinidad de recursos. Por ello, permiten a niños y niñas crear sus propias historias y composiciones, a partir de la observación de hechos y situaciones reales, presentadas a través de la creación de experiencias físicas o virtuales en estos espacios culturales.
El cambio de los museos debido a la pandemia
Durante la pandemia del COVID-19, los museos enfrentaron una crisis por la falta de visitantes. Así, tuvieron que innovar e ingresar al mundo digital para llegar a nuevas audiencias. La transformación no solo pasaba por sus piezas, objetos o colecciones, sino por una mirada agradecida hacia el usuario habitual de los museos y los nuevos usuarios que se acercaban a estos sitios que físicamente no los habían visitado.
Este proceso, que va de la mano con la adaptabilidad del patrimonio humano, debe ir acompañado de una constante capacitación. Sin este recurso es casi imposible cumplir con una de las principales funciones de estos centros culturales: ser un medio de comunicación de este ecosistema digital, donde el eje central es el usuario.
Los museos como espacios de conocimiento
Captura de pantalla de visita virtual al Museo Nacional del Ecuador. Redacción Comercial
Captura de pantalla de visita virtual al Museo Smithsonian. Redacción Comercial
Es necesario considerar que el uso de estos espacios de conocimiento debe ser parte de la agenda nacional de cualquier sistema educativo.Estos están preparados para ser parte integral del proceso de enseñanza-aprendizaje, en beneficio de la calidad educativa de un país. A nivel mundial, se utilizan con más énfasis en unos países que en otros, articulando proyectos, alianzas y colaboraciones, creando propuestas interesantes para utilizar sus espacios virtuales, dentro de la práctica docente en todos los niveles de la educación.
La investigación de PhD. Janio Jadán Guerrero tiene como objetivo resaltar esas iniciativas en Ecuador, que permanecen lejos del ojo público, pero que deberían visibilizarse por su calidad, pertinencia y resultados positivos e innovadores.
Los museos más allá de sus recorridos físicos
El estudio resalta que, actualmente, los museos y centros culturales deben mirar más allá de sus accesos físicos. Esto debido a que la gran apertura digital, a raíz de la pandemia, ha permitido a los profesionales de estos centros desarrollar sus habilidades en comunicación online, redes sociales, análisis de datos, creación de nuevos contenidos y desarrollo de experiencias de usuario.
“Nos estamos dando cuenta entonces de que parte de nuestro crecimiento personal también depende del desarrollo de nuestras competencias digitales, habilidades que permitan a los profesionales interesados en el tema promover el logro de aprendizaje significativo, para provocar la curiosidad intelectual”.
Fragmento de la investigación
Visitar museos como parte del proceso de aprendizaje
Acercar a niños, niñas y adolescentes a los espacios culturales es un reto que los líderes educativos y docentes de todos los niveles deben compartir. Esto con el objetivo de mover el aula a los pasillos, salones, recorridos, rincones y monumentos de nuestras ciudades y del mundo. Por otro lado, el espacio cultural debe estar preparado para este nuevo metamuseo, a través de mediaciones donde el actor principal, como hemos dicho, es el usuario.
También es importante que los centros culturales den la oportunidad de conocer a los artistas de las colecciones u obras presentadas porque darán relevancia a la experiencia desarrollada. Además, para el artista será una retroalimentación de su obra observada y leída desde la didáctica educativa. También nos permitirá conocer situaciones o experiencias acaecidas en la producción de las obras, datos que acercarán al artista a su audiencia.
¡Las posibilidades para llevar el mundo de las bellas artes a niños, niñas, jóvenes y adultos, son infinitas!
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