Sábado, 04 de mayo de 2024

Tatiana Bilbao y una arquitectura que se pregunta por la diversidad humana

Autor:

Redacción Comercial

Actualizada:

5 Oct 2020 - 17:49

La propuesta de esta arquitecta mexicana está envuelta en una profunda interrogante: ¿cuáles son las necesidades habitacionales de la vida real?

Autor: Redacción Comercial

Actualizada:

5 Oct 2020 - 17:49

La propuesta de esta arquitecta mexicana está envuelta en una profunda interrogante: ¿cuáles son las necesidades habitacionales de la vida real?

De hecho, su obra, definida como humanista por el New York Times, está enfocada en que las casas sean el reflejo de lo que son las personas: diversas y mutantes. Su aproximación a la arquitectura es, en esencia, un cúmulo de cuestionamientos sobre ¿cómo establecer un sistema en el que cada uno construya su propio espacio? 

Sus planteamientos son tan a lugar, porque ella conoce bien el ecosistema de construcción de viviendas. Antes de montar su propio estudio fue asesora del Ministerio de Desarrollo y Vivienda del Distrito Federal de México. Esa es la razón por la que cree que, además del financiamiento y los arquitectos, un proyecto debe contar con la gente indicada para que, ante todo, sea coherente con la realidad de sus ocupantes.

“Debemos volvernos un traductor del otro y generar espacios que faciliten muchísimas otras formas de vida”

Tatiana Bilbao, arquitecta mexicana

Y es que para ella, el asunto está en generar viviendas pensadas desde el individuo. A partir de esta concepción, reinventa el rol del arquitecto. Tal es así que le imprime la misión de volverse un vehículo para ayudar a cada uno a producir su hábitat. “Debemos volvernos un traductor del otro y generar espacios que faciliten muchísimas otras formas de vida”, enfatiza.

Con esta visión trabaja en Tatiana Bilbao ESTUDIO, fundado en 2004, en la ciudad de México.  En este espacio analiza el contexto que rodea a una diversidad de proyectos, que van desde planes maestros hasta tipologías de viviendas asequibles. Parte del eje de trabajo de la firma, que también lleva el sello humanista de Bilbao, es contribuir a su entorno desde una flexibilidad que responda a las necesidades cambiantes de los seres humanos.

Una arquitectura diversa y con identidad:

Viviendas que plasmen la diversidad de la vida

Otro de los rasgos característicos de esta arquitecta, recientemente galardonada con el Tau Sigma Delta Gold Medal del 2020, es la franqueza. Por ello admite que su trayectoria ha sido una búsqueda constante de caminos alternativos a los de su propia formación, muy ligada al criterio de que el arquitecto es quien debe dar soluciones desde una perspectiva vertical y erudita.

“El reto más grande es crear espacios que generen identidad a partir de la construcción y aceptación de la individualidad y la diversidad”, explica Bilbao.  Para que esto suceda, precisa, el acceso a vivienda debe ser equitativo, “pero no homogéneo porque la vida es tremendamente diversa”.

Que cada quien decida cómo necesita vivir:

En gran medida, el trabajo de Bilbao ha consistido en apuntalar ese pensamiento.  Lo hace a través de su obra y también junto a sus alumnos de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Yale, donde es profesora recurrente. “Escuchar a los estudiantes me hace cuestionarme y reflexionar sobre esas necesidades absolutas. El intercambio con ellos se vuelve un círculo virtuoso”, aclara.

Quito: la ciudad que vivirá su arquitectura

La propuesta arquitectónica de Bilbao está presente en varias ciudades de México; en California, Estados Unidos, en Lyon, Francia; en Arévalo España y próximamente también en Quito, como parte de los proyectos de Uribe Schwarzkopf.

El interés de Tatiana Bilbao por la capital de Ecuador se remonta a su época de estudiante.  Dice que la declaración de Patrimonio Cultural de la Humanidad le llamó la atención desde entonces. “El proceso de colonización, que sin duda fue muy complejo y no admite validaciones, le dejó a la ciudad un entorno cultural y una arquitectura que la vuelven muy interesante”, reflexiona.  

Recorra una breve muestra de la obra de Tatiana Bilbao :

Además, el ecosistema natural en el que se inserta la ciudad es otro factor que atrapó su mirada y su atención.  “De alguna forma, trabajar en Quito es una manera de aprender de esta ciudad para entender mi propio contexto”, remarca.  

Ante la pregunta de ¿qué planea hacer en Quito? La respuesta en tan contundente como consecuente: “arquitectura para el ser humano.  Porque todos tenemos dos necesidades básicas.  La una es tener salud y la otra es tener un refugio, que a su vez nos permite tener salud.  La interrogante es cómo generar ese espacio”.

Vivir es establecer un sistema de relaciones 

Para Bilbao, establecer relaciones en torno a los espacios es tan indispensable como desnudarlos de etiquetas. De ahí que su obra promueve, por ejemplo, que cuatro departamentos compartan una terraza y seis un huerto. "Porque es ahí donde se tejen relaciones y conflictos que son parte de la vida".

Queda en evidencia que la mirada de Bilbao divisa vínculos de comunidad que van más allá de lo público y lo privado. "Si vives en un edificio de 10 puertas iguales, con un elevador para tres personas y luego sales a la calle donde hay 3 millones de seres humanos, ¿cómo empiezas a relacionarte?", reflexiona.

"Es necesario aprender cómo en el entrono rural se establecen una serie de oportunidades para que cada quien construya su propio hábitat".

Tatiana Bilbao, arquitecta mexicana

Esta preocupación, tan auténtica como necesaria en los tiempos que corren, encuentra remanso en la emulación de lo que ocurre en la ruralidad .  "Es necesario aprender cómo en el entorno rural se establecen una serie de oportunidades para que cada quien construya su propio hábitat". Su planteamiento es, sin duda, un llamado a construir espacios profundamente empáticos con el contexto y con la esencia humana.