Sábado, 27 de abril de 2024

Alcaldesa de Santa Cruz: "Galápagos ha retrocedido 100 años"

Autor:

Alexander García

Actualizada:

26 Jun 2023 - 15:30

La alcaldesa de Santa Cruz, Fanny Uribe, dice que hay falta de planificación por parte de Petroecuador, Ministerio de Transporte y del Consejo de Gobierno en el manejo de la crisis. Los comerciantes de Galápagos han dejado de recibir más del 40% de las mercancías.

Fanny Uribe, alcaldesa de Santa Cruz, uno de los tres cantones de las islas Galápagos.

Autor: Alexander García

Actualizada:

26 Jun 2023 - 15:30

Fanny Uribe, alcaldesa de Santa Cruz, uno de los tres cantones de las islas Galápagos. - Foto: Alexander García.

La alcaldesa de Santa Cruz, Fanny Uribe, dice que hay falta de planificación por parte de Petroecuador, Ministerio de Transporte y del Consejo de Gobierno en el manejo de la crisis. Los comerciantes de Galápagos han dejado de recibir más del 40% de las mercancías.

La alcaldesa de Santa Cruz, Fanny Uribe, revela que los comerciantes de las islas Galápagos han dejado de recibir más del 40% de las mercancías que adquirían mensualmente.

La avería de uno de los dos buques que abastecen a las islas ha generado un desfase en la provisión de bienes y servicios en la provincia desde finales de marzo.

El desabastecimiento de productos y la falta de gas en las islas Galápagos impacta a la economía local y afecta el nivel de servicios que se ofrecen a los turistas, dice.

En entrevista con PRIMICIAS, Uribe expresa su preocupación por la falta de respuesta de las autoridades y pide que se tomen medidas urgentes.

La alcaldesa del cantón más poblado de Galápagos, con más de 20.000 habitantes, aduce falta de planificación y acción de los organismos del Estado ante el problema.

Uribe señala como principales responsables de la crisis a entidades como Petroecuador, el Ministerio de Transporte y al Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos, organismo que administra las islas.

¿Cómo ha impactado la falta de uno de los dos barcos que abastecen a las Galápagos?

El tema de desabastecimiento de gas y productos de primera necesidad es grave.

El único buque que está transportando productos y una parte de gas es el barco Fusion, que tiene una capacidad para 3.500 toneladas de carga.

Y nosotros, en toda la provincia requerimos de 9.000 toneladas mensuales de los diversos productos de consumo periódico. Tenemos un desfase.

¿El uso de barcos estatales de la Armada ayudará a cerrar la brecha en la provisión de gas?

Si bien es cierto el barco Calicuchima arribó hace una semana con más de 8.000 bombonas de gas para los tres cantones de la provincia, eso no es suficiente.

Solo en Santa Cruz requerimos 6.000 cilindros de gas para uso doméstico y 2.000 industriales, cada 15 días, aproximadamente.

El Calicuchima nos dejó a nosotros en Santa Cruz 4.200 bombonas. Entre ellos se destinaron 1.200 a uso industrial, pero ya se terminaron. Y este jueves ya no dieron turnos en el centro de acopio de Petroecuador.

¿Hasta cuándo contarán con gas doméstico?

El sábado (24 de junio) se prevé que se termine el gas doméstico, más o menos. Están vendiendo 200 cilindros por día, de acuerdo al último dígito de la cédula.

Son dos dígitos por día y un cilindro mensual por familia. Pero tampoco es suficiente, la gente duerme afuera del centro de acopio para obtener un turno a las 13:00 o 15:00 del día siguiente.

Y para luego ir a comprar el gas un día después. Es un maltrato y un servicio inhumano, que hemos rechazado.

Hemos pedido a Petroecuador que no alargue la agonía haciendo que los usuarios se amanezca afuera del centro de venta.

¿Qué entidades son las responsables de ese maltrato?

Hay que tener en cuenta que todo se agudizó con un incendio en el cuarto de máquinas del buque Isla de la Plata, que lo tiene fuera de servicio por casi tres meses.

Pero más allá de que no tengamos barco, la responsabilidad es de Petroecuador, que desde finales de marzo no aplicó ningún plan de contingencia para resolver el problema.

Eso es indolente. Tenían que haber fletado o arrendado otra embarcación.

¿La responsabilidad también recae sobre el Consejo de Gobierno que administra las islas y a cuyas sesiones son convocados los alcaldes?

También es un problema que atañe a la Subsecretaría de Puertos, a su cabeza: el Ministerio de Transporte y Obras Públicas.

Y al presidente del Consejo de Gobierno. Estas dos entidades deben gestionar la entrada de una nueva embarcación. Conocemos que hay seis oferentes en la Subsecretaría de Puertos.

Desde hace un año se les había advertido que necesitábamos una embarcación más. El Ministerio de Turismo también tiene que ayudarnos a gestionar soluciones.

¿Es decir, Galápagos requiere de tres embarcaciones de carga y solo tenía dos?

Así es. El barco Fusion tiene capacidad para 3.500 toneladas. El Isla de la Plata, que en este momento está dañado, tenía capacidad para 2.500.

Son 6.000 toneladas mensuales entre los dos, pero Galápagos requiere de 9.000 toneladas de carga, para todo tipo de productos.

Tenemos tres meses con el problema de desabastecimiento y no se le da paso a nuevas embarcaciones.

¿Cuándo se podrá incorporar el barco averiado o uno nuevo?

No hay certezas. Nos dicen que se está tramitando, según nos han informado de forma extraoficial. Mientras que el barco averiado, el Isla de la Plata, se incorporaría en julio.

Entre el 24 y 27 de junio el Consejo de Gobierno despachará junto a la Armada tres naves, con casi 15.000 nuevas bombonas de gas.

¿Eso solucionará el problema?

El buque Calicuchima volverá a traer gas, se prevén despachar 4.000 bombonas para Santa Cruz, pero aún son insuficientes. Ahora hay una demanda represada.

Solo en Santa Cruz necesitamos 16.000 bombonas de gas mensuales. El barco Calicuchima sale el 27 de junio de Guayaquil. Y estaría en la isla el 30, el 1 de julio prevén bajar el gas.

Entonces vamos a tener un desfase de al menos una semana sin gas. Y hay que ver qué pasará en dos o tres semanas más.

¿Cómo ha impactado el desabastecimiento al turismo y los hogares?

Muchos restaurantes han restringido sus horarios y sólo están abriendo en las noches, por la falta de gas.

Somos una provincia netamente turística y esto afecta el nivel de servicios que se ofrecen, y sobre todo, a la economía local.

También las familias han tenido que recurrir a la leña o al carbón para cocinar. Hemos retrocedido 100 años, sin tener con qué cocinar en pleno siglo XXI.

Y eso no puede suceder en un Patrimonio Natural de la Humanidad como Galápagos.

"Hemos retrocedido 100 años, sin tener con qué cocinar en pleno siglo XXI".

¿En este escenario, el precio de reventa de un cilindro de gas llega a valores exorbitantes?

Todo esto se presta para la especulación, un cilindro de gas de USD 1,70 se llega a vender hasta USD 60 o USD 80. Hay restaurantes que han tenido que cocinar con leña.

Más restaurantes van a tener que cerrar por fechas o reducir los horarios si se extiende la crisis de abastecimiento.

En Santa Cruz tenemos restaurantes que necesitan siete cilindros de gas diarios para atender la demanda de turistas.

"Un cilindro de gas de USD 1,70 se llega a vender hasta USD 60 o USD 80".

¿Cuánto sería el impacto de tres meses con problemas de abastecimiento para el comercio?

El impacto económico lo podemos medir en términos de lo que los comerciantes han dejado de vender por reducción de sus cupos de carga.

Son 7.500 toneladas de productos que en tres meses no han podido llegar por barco -se recibe carga a un mayor costo por avión-, estas son ventas que no se han hecho y recursos que de una u otra manera se han dejado de percibir.

En uno de los viajes se quedaron 1.600 bultos de alimentos perecibles en Guayaquil, por ejemplo, solo allí se reportaron pérdidas por USD 120.000.

¿Cuánto se estima que han dejado de vender los comerciantes?

Las 2.500 toneladas mensuales que trasladaba el buque averiado, el Isla de la Plata, representan el 41,66% de las mercancías y productos que llegaban a Galápagos antes de la crisis.

Son unos USD 5 millones mensuales de mercancías que no se han podido vender, porque no las hemos podido traer. Eso nos da una idea del impacto en las ventas y en las pérdidas.