The New York Times, Le Monde, El País, Der Spiegel y The Guardian colaboraron hace 12 años para filtrar extractos de los 250.000 documentos, comprometedores con la administración estadounidense.
El Gobierno de Estados Unidos debe abandonar el proceso judicial contra Julian Assange, pues socava la libertad de prensa, señalan en una carta los medios de comunicación que ayudaron al fundador de WikiLeaks a publicar los cables diplomáticos.
The New York Times, Le Monde, El País, Der Spiegel y The Guardian colaboraron hace 12 años para filtrar extractos de los 250.000 documentos comprometedores con la administración estadounidense. Assange obtuvo esa documentación del entonces soldado norteamericano Chelsea Manning.
Los directores de esos medios se unen para oponerse a los planes de la Justicia estadounidense, de acusar formalmente a Assange, con la legislación diseñada para someter a juicio a los espías de la I Guerra Mundial.
"Publicar no es un delito", señalan estos medios, que consideran que el proceso contra Assange es un "ataque directo contra la libertad de los medios".
El activista permanece preso en la cárcel inglesa de máxima seguridad de Belmarsh, en el sur de Londres, desde 2019, año en que fue arrestado en la embajada de Ecuador en ese país. Allí residió como refugiado durante siete años.
La extitular británica de Interior Priti Patel aprobó la extradición de Assange a Estados Unidos el pasado junio, si bien los abogados del australiano están recurriendo esa decisión.
El diario británico The Guardian recuerda que bajo el mandato de Barack Obama, el Gobierno de Estados Unidos determinó que no sometería a juicio al fundador de WikiLeaks por las filtraciones de 2010, por el precedente que esto sentaría.
Ahora los citados medios apelan a la administración del actual presidente Joe Biden, para que retire los cargos.
En la misiva, el grupo de medios expresa sus "graves preocupaciones por el proceso judicial de Julian Assange, por obtener y publicar material clasificado".
"Obtener y difundir información sensible cuando es necesario en aras del interés público es una parte fundamental del trabajo diario de los periodistas. Si ese trabajo se criminaliza, nuestro discurso público y nuestras democracias se vuelven significativamente más débiles", apuntan.
Agregan que "12 años después de la publicación del (llamado) 'Cablegate', es hora de que el Gobierno estadounidense finalice su enjuiciamiento a Julian Assange".
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