Jueves, 25 de abril de 2024

Científicos buscan transformar las pepas de aguacate y agave en ecoempaques

Autor:

Nelson Dávalos

Actualizada:

6 Dic 2021 - 0:03

Un grupo de investigadores de tres universidades de Ecuador se ha propuesto crear ecoempaques a partir de desechos agrícolas. El objetivo es reemplazar los plásticos de un solo uso en la industria.

Biopolímeros transformados en material para ecoempaques.

Autor: Nelson Dávalos

Actualizada:

6 Dic 2021 - 0:03

Biopolímeros transformados en material para ecoempaques. - Foto: Universidad Yachay

Un grupo de investigadores de tres universidades de Ecuador se ha propuesto crear ecoempaques a partir de desechos agrícolas. El objetivo es reemplazar los plásticos de un solo uso en la industria.

Los empaques de un solo uso son los principales agentes de contaminación por plásticos en el planeta. Pero estos recipientes son imprescindibles para el almacenamiento, transporte y conservación de productos de la industria tecnológica, alimenticia, sanitaria y automotriz.

¿Es posible reemplazarlos? Para un grupo de investigadores de tres universidades de Ecuador, la clave está en reutilizar los residuos agrícolas como las pepas de aguacate y agave.

La iniciativa de convertir desechos en ecoempaques se financia con apoyo de la organización Cedia Ecuador, y con el propósito de disminuir los problemas ambientales que causan los plásticos.

En entrevista con PRIMICIAS, Rose Mary Michell, investigadora de la Universidad Yachay, explica que al momento trabajan con la empresa privada UyamaFarms, que les provee de la materia prima: las pepas de aguacate y agave.

"Estamos extrayendo los biopolímeros de estos residuos en el laboratorio", dice Michell.

La investigadora detalla que los biopolímeros son moléculas presentes en todos los seres vivos, incluyendo los desechos agroindustriales.

De desechos a ecoempaques

Según la investigadora de Yachay, Michell, la extracción de biopolímeros se realiza a través de técnicas de separación física. Luego se transforma la pepa de aguacate en almidón termoplástico (TPS) y el agave en celulosa.

La unión de estos dos materiales cumple con todos los requisitos aptos para fabricar un empaque, es decir es resistente, fuerte y flexible para almacenar el producto final.

Si bien el proyecto de la elaboración de ecoempaques está en fase de desarrollo, Michell señala que podría ser una solución que reduzca costos y que sea responsable con el ecosistema.

"La investigación nos demostrará si estos materiales son viables para los empaques, pero eso lo descubriremos con el tiempo y con los estudios que sigamos haciendo".

Rose Mary Michell, investigadora de la Universidad Yachay

El siguiente paso del estudio es probar el material frente a las propiedades barrera de los empaques comunes. Estas propiedades permiten que un producto permanezca fresco, y "que no se escape el aire de la funda".