Música de Bach a las cinco de la tarde de un domingo

Casi siempre el día y la hora no son lo más importante en un acontecimiento de cualquier índole, incluso en el musical, pero llamó mi atención y la de muchos que la obra de uno de los más destacados músicos universales se presente la tarde de un domingo y con excelente respuesta del público.

En efecto, el domingo 21 de julio, por primera vez se ofreció en la Casa de la Música un programa exclusivo con algunas de las obra s más sobresalientes del compositor alemán Johann Sebastian Bach (1685-1750), para algunos el Dios, para otros el padre de la música.

Autor de más de mil obras, en su mayoría religiosas o dedicadas a Dios, un grupo de músicos ecuatorianos se propuso rescatar sus composiciones, exhibirlas, mostrarlas y tocarlas para que el culto público quiteño se deleite en un domingo e inicie al día siguiente una semana con diferentes motivaciones.

‘Orquesta Barroca Bach Ecuador’ es el nombre de una iniciativa liderada por el director musical Danny Gallegos y un grupo de músicos jóvenes llenos de ilusiones para interpretar la prolija música del compositor alemán del barroco tardío.

Una extensa obra que no es solamente instrumental, sino coral, cantatas, misas, pasiones, conciertos prodigiosos como los Brandemburgo, que el músico creó durante más de medio siglo, especialmente en las iglesias.

La orquesta está integrada por instrumentistas especialistas en las áreas de cuerda frotada, vientos madera, vientos metal, percusión sinfónica y por talentosos cantantes líricos. Participaron como solistas Erika Guamán (soprano), María Augusta Jibaja (alto), Andrés Carrera (bajo).

En el ambiente musical se ha hablado de las limitaciones que tenemos en el país para presentar programas de gran categoría, como por ejemplo una ópera o una sinfonía coral. La traducción, el vestuario, las exigentes voces solistas figuran entre otros factores adversos.

Sin embargo, Gallegos reunió a músicos llenos de ganas para enfrentar todos los desafíos, tal como ocurrió en el escenario de la Casa de la Música con este programa:

• Suite orquestal número 2 BWV 1067
• I. Obertura II. Rondó III. Zarabanda IV. Bourrée I / II
• y la V. Polonaise (Lentement) y Double BWV 1067 
• VI. Minuet VII. Badinerie
• (Solista Luis Fernando Carrera, flauta)
• Concierto para Oboe y Violín BWV 1060R
• I. Allegro II. Adagio III. Allegro
• (Solistas: Carolina Gallegos, oboe y Santy Abril, violín)

Lo más destacado de la tarde y parte de la noche fue la Cantata BWV 72 'Alles nur nach Gottes Willen' (Todo sea por la voluntad de Dios). Tenía mis dudas sobre la interpretación, no conocía el nivel de las voces corales, que demostraron su bien logrado profesionalismo.

Aquí los solistas fueron Erika Guamán, soprano; María Augusta Jibaja, alto y Andrés Carrera, bajo; llamó la atención en el centro del escenario un clavicémbalo, que era uno de los instrumentos que dominaba Bach, además del violín y el órgano. Dany Gallegos explicó que la Orquesta Barroca Bach Ecuador fue creada para trascender.

Le comenté de las pasiones y de las misas bachianas, de las posibilidades de interpretarlas y anticipó que es cuestión de trabajar y que los jóvenes tienen una enorme disposición para emprender en todos los proyectos.

"Tenemos objetivos a corto, mediano y largo plazo. Presentaremos conciertos periódicamente, como por ejemplo los Brandemburgo, suites, cantatas, las misas en sol y en si menor, el oratorio de Navidad hasta llegar a las pasiones", dijo Gallegos a PRIMICIAS.

Se sintió sorprendido por la acogida del público quiteño y por el apoyo que nació durante la presentación oficial del proyecto en las redes sociales; el público estaba expectante y el concierto registró una buena acogida en domingo, resumió el músico.

En nuestro medio, anota la mezzosoprano María Augusta Jibaja “no es común para un cantante este tipo de repertorio, tuvimos que seleccionar meticulosamente a los integrantes del ensamble vocal”. Se analizó, dice, la capacidad de control del vibrato, que para este repertorio es inexistente y, en cuanto al color, que las voces agudas tengan un brillo ligero, pero a la vez redondo. “Y en cuanto a las voces agudas, que tengan un color parejo y cuerpo en su sonido”.

Ensamblar dos voces por cuerda es complicado y “para tener éxito buscamos que las voces de cada cuerda tengan facilidad de ensamblar entre sí”, subraya Jibaja.

Entre finales del siglo XIX y comienzos del XX la música clásica y romántica fueron muy criticadas por las nuevas corrientes modernistas que nacían, especialmente, en Francia con el grupo de Les six o por los rusos.

Lo curioso es que el músico que nunca ha sido cuestionado por esas nuevas corrientes es precisamente Johann Sebastian Bach; ni siquiera por la Segunda Escuela de Viena que llegó mucho más lejos al romper con la tonalidad y crear el dodecafonismo.

Simplemente, nunca pudieron con Bach, con sus variaciones Goldberg, sus tocatas y fugas, su clave bien temperado, las pasiones de San Juan y San Mateo, que fueron extraídas de recónditos baúles por Félix Mendelssohn desde 1829.