Economía plateada: cómo asegurar tu bienestar financiero después de los 60
A medida que aumenta la esperanza de vida en Ecuador, la economía plateada cobra fuerza. Descubre cómo prepararte para esta etapa, incluso si llegas a los 60 años sin un fondo estructurado.

Pareja de adultos mayores caminando abrazados por un parque, con una alcancía dorada y monedas en primer plano.
- Foto
Canva
Autor:
Actualizada:
Compartir:
La economía plateada —o silver economy— abarca todos los productos, servicios y dinámicas económicas centradas en las personas mayores de 60 años. Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), este concepto representa un motor clave para el crecimiento económico del futuro, ya que los adultos mayores no solo demandan más servicios, sino que también pueden seguir siendo productivos y activos en el mercado. La vejez ya no se percibe como un cierre, sino como una etapa activa que puede durar 20 o incluso 30 años más después de jubilarse.
En Ecuador, sin embargo, este grupo etario enfrenta una realidad desafiante. No solo por un sistema de pensiones débil, sino por la falta de cultura de ahorro y la informalidad laboral que impide acceder a una jubilación digna.
Como explica el consultor financiero Ismael Vélez: “Vivimos en una época en la cual estamos persiguiendo el concepto de longevidad. Hace unos 30 años, las expectativas de vida eran mucho menores, pero hoy si usted se jubila a los 60 años tiene un tercio de vida por delante”.
Entonces, ¿cómo planificar tu vida financiera después de los 60? Aquí te dejamos una guía práctica con datos, consejos y recomendaciones que necesitas tomar en cuenta.
La verdad incómoda: ¿puedes confiar en el sistema de pensiones?
En teoría, sí. En la práctica, es riesgoso. En Ecuador, el sistema de pensiones funciona bajo un modelo de reparto: los trabajadores activos pagan las pensiones de los jubilados actuales. Pero según Vélez, el sistema tiene problemas estructurales graves: “Nuestro sistema no es de acumulación y, además, cubre salud. Hay una ingente cantidad de gastos y no sabemos cuánto tiempo más podrá sostenerse”.
Y lo más preocupante: “Para 2035 o 2040, la cantidad de personas mayores de 50 años listas para jubilarse puede hacer que el sistema se torne inviable”, advierte. Con reformas estancadas y un panorama incierto, es vital pensar en fuentes complementarias de ingreso.
Tip: no dependas únicamente de la pensión del IESS. Considera otras formas de inversión o ahorro (seguros privados, bienes raíces, emprendimientos) como respaldo.
¿Y si no tengo fondo de retiro? No todo está perdido
Miles de ecuatorianos llegan a los 60 sin jubilación. Muchos trabajaron en la informalidad o nunca aportaron al IESS. ¿Qué pasa entonces?
“Estas personas tienen niveles de dependencia familiar bastante altos, y eso puede involucrar problemas, porque alguien tiene que hacerse cargo”, explica Vélez. El impacto en la economía del hogar es fuerte: más gastos, menos capacidad de ahorro, y una carga emocional significativa.
A esto se suma una preocupación creciente: “Hoy se habla mucho del Alzheimer, la demencia senil. Y si esas personas no tienen seguridad social, alguien tiene que hacerse cargo. El Estado no lo está haciendo”, advierte.
Tip: si estás en esta situación, empieza por crear un presupuesto básico. Controla tus gastos, identifica habilidades que puedas monetizar y prioriza tu bienestar antes que las herencias.
¿Las pensiones en Ecuador son suficientes?
Vélez lo resume así: “Las pensiones son bastante buenas si se comparan con América Latina, pero las realidades son distintas. Si a los 65 años tienes una pensión de USD 2.500, tu casa pagada y pocos gastos, probablemente vivas tranquilo. Pero eso no le pasa a la mayoría”.
El problema son quienes no tienen acceso a un retiro digno. “Los recursos tendrán que salir de algún lado, quizá con un bono de dignidad, porque muchas personas han estado en el empleo informal y en condiciones precarias toda su vida”, reflexiona.
Tip: si aún no te jubilas, evalúa tu historia laboral y empieza a cotizar si puedes. Aunque sea tarde, algo es mejor que nada.
¿Quieres seguir generando ingresos después de los 60? Emprender puede ser una opción
La reinserción laboral en la tercera edad es difícil, pero no imposible. De hecho, emprender es una de las mejores formas de mantenerse activo y obtener ingresos.
Según Vélez, los adultos mayores tienen una gran ventaja: “Los grados de fracaso de los emprendimientos suelen ser mucho más bajos en personas de la tercera edad, porque son menos impulsivos, más reflexivos, no toman riesgos de forma acelerada y piensan mejor las cosas que una persona de 25 años”.
Ideas para emprender después de los 60:
- Venta de productos caseros (comida, artesanías, textiles)
- Consultorías o mentorías según tu experiencia profesional
- Tutorías escolares o talleres en línea
- Alquiler de habitaciones o bienes
Tip: empieza con algo pequeño y medible. No necesitas mucho capital para comenzar, pero sí claridad y enfoque.
¿Cómo cambian tus gastos después de jubilarte?
A los 60 o 65, los gastos ya no son los mismos. Las prioridades cambian y también el patrón de consumo.
Gastos que aumentan:
- Salud (medicinas, exámenes, seguros)
- Cuidado personal y asistencia
- Servicios médicos domiciliarios
- Costos funerarios y legales
Gastos que disminuyen:
- Educación de hijos
- Movilidad diaria
- Consumo impulsivo
“Las prioridades deben ser salud, alimentación, servicios básicos y un fondo de emergencia”, recomienda Vélez. El resto dependerá del estilo de vida y la capacidad de ahorro de cada quien.
Tip: revisa tus gastos cada 3 meses. Elabora un presupuesto mensual claro y realista. No dejes nada al azar.
Aún estás a tiempo, empieza hoy a planificar tu jubilación
Nunca es demasiado pronto. “Si usted entra a la fuerza laboral a los 23 años, es muy difícil que piense en la jubilación. Pero desde que empezamos a trabajar debemos destinar cierta cantidad de ahorro como plan de vida”, dice Vélez.
Checklist para comenzar hoy:
- Ahorra mínimo el 10% de tus ingresos.
- Elimina gastos hormiga: taxis innecesarios, suscripciones que no usas, comida a domicilio.
- Invierte a largo plazo.
- Ten un fondo de emergencia que cubra al menos 6 meses de gastos.
- Piensa en tu bienestar, no solo en dejar una herencia.
“Muchas veces pensamos que los hijos o nietos deben tener una herencia. Pero podríamos vender una casa grande, comprar un departamento para vivir, y otros dos para alquilar y vivir tranquilos. Pensamos mucho en la herencia y muy poco en nuestro bienestar”, reflexiona Vélez.
La economía plateada en Ecuador exige una transformación profunda en la forma en que concebimos la vejez. La planificación financiera debe comenzar en la juventud, adaptarse en la madurez y reforzarse en la tercera edad. Como resume Vélez, “lograr estructurar una cultura de ahorro es sumamente importante. No se trata solo de acumular dinero, sino de planificar la vida”.
Compartir: