Así se armó la emergencia para comprar medicinas e insumos en el IESS, evitando al Consejo Directivo
El IESS lleva adelante un proceso de contratación por emergencia, con un presupuesto de USD 96 millones, para superar la crisis de desabastecimiento que atraviesa. Sin embargo, una primera declaratoria y su ratificación no lograron justificar las condiciones de la emergencia, y generaron problemas internos.

Pacientes acudieron al hospital General del Norte Ceibos, en Guayaquil, para solicitar atención médica, el 22 de septiembre del 2025.
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La emergencia declarada por el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) para enfrentar la crisis de desabastecimiento de medicinas e insumos médicos enfrenta cuestionamientos y dudas casa adentro. Aunque la institución logró lanzar los primeros procesos de compra, esta emergencia generó un sacudón interno, que incluso podría haber influido en la separación de la vocal representante de los afiliados, Mercy Maldonado.
Documentos disponibles en el portal de Compras Públicas evidencian que el director general del IESS, Francisco Abad, ha firmado tres resoluciones de emergencia. Pero las dos primeras se cayeron por problemas internos. La tercera quedó vigente, y es la que se está usando para recibir ofertas.
Hasta la tarde del miércoles 22 de octubre, el IESS ha requerido a los proveedores que presenten ofertas para 216 procesos de contratación por emergencia, para la adquisición de medicamentos e insumos médicos. El presupuesto es de USD 96 millones.
Problemas en el Consejo Directivo
Los problemas internos comenzaron el 19 de septiembre de 2025. Ese día, Abad firmó la resolución 038, declarando la emergencia para la adquisición de "medicamentos, bienes estratégicos en salud y servicios conexos". Con estas contrataciones, el IESS buscaba adquirir aquellos ítems que tenían stock para menos de tres meses.
Minutos antes de la firma, sin embargo, la Procuraduría Jurídica del IESS emitió un informe jurídico en el que recomendaba que la resolución sea elevada al Consejo Directivo para su "conocimiento y resolución".
El documento cita una resolución del propio Consejo Directivo de 2023, que autoriza al Director General del IESS a firmar contratos de hasta el 0,0002% del Presupuesto General del Estado. Este monto correspondería en 2025 a USD 7,2 millones. Por lo tanto, si el monto de los contratos supera ese umbral, se requiere autorización del Consejo Directivo.
Es así que después de que la resolución fue emitida por Abad, esta fue puesta en conocimiento del Consejo Directivo. PRIMICIAS conoció que, en la sesión, el presidente del directorio, Édgar Lama, no logró el apoyo a la declaratoria de emergencia de parte de las vocales de los empleadores y de los afiliados.
Había dos problemas que derivaron en que Lama se quedara solo en su apoyo a la resolución. Primero, el informe técnico que sirve de base justificaba la emergencia en el desabastecimiento, aunque la Ley del Servicio Nacional de Contratación Pública establece que las emergencias no pueden ser usadas "para solventar las omisiones o deficiencias en la planificación institucional".
El informe técnico dice que "la situación de desabastecimiento de medicamentos, y bienes estratégicos en las unidades médicas del Seguro General de Salud Individual y Familiar del IESS constituye una emergencia concreta, inmediata, imprevista, probada y objetiva". Es decir, justifica la emergencia por el desabastecimiento, sin apuntar a la causa del desabastecimiento.
Segundo, las vocales abogaron por una veeduría para mejorar el proceso de transparencia de dichas contrataciones, y que esto fuera incluido en la resolución.
Pero la resolución ya estaba emitida y firmada. Es por ello que el tema quedó en el limbo una semana.
Se cae la emergencia
Una semana después, el 25 de septiembre, a las 22:00, la Dirección de Salud del IESS emitió un nuevo informe técnico. En este, se cambiaron los argumentos, y ahora sostiene la necesidad de una emergencia por: "el incremento, extraordinario e imprevisible en la demanda de servicios de salud que superó la capacidad de respuesta institucional".
Como recogió PRIMICIAS, en este informe se habla de más de 13.000 cirugías represadas desde hace más de 90 días. El documento también menciona que desde 2024, el IESS registró "un aumento sustancial" en la atención de consultas externas, procedimientos quirúrgicos, programas de hemodiálisis y tratamientos de enfermedades crónicas y catastróficas, "no previsto en las proyecciones". Las cifras del informe incluyen una comparación de 2024 con 2025, pero no de años anteriores.
Horas después, el 26 de septiembre, a las 14:00, Abad emitió una nueva resolución, número 041. En esta, ratifica la emergencia ya declarada en la resolución 038, pero añade que "ante la necesidad de constatar y ponderar las condiciones fácticas, se incorporará los parámetros que prioricen las necesidades de los grupos de atención prioritaria, garantizándose los derecho conexos e interdependientes a la vida digna, mediante la emisión de un nuevo instrumento declarativo".
Pero pasadas las 18:00 de ese día, el mismo Abad firmó un informe de cierre de dicha emergencia, con el argumento de que no se firmó ningún contrato ni se erogó ningún recurso. Y a las 19:12 emitió una nueva resolución, número 042, declarando nuevamente la emergencia con base en el nuevo informe técnico.
Evadiendo al Consejo Directivo
Dos funcionarios del IESS que hablaron con PRIMICIAS bajo condición de reserva confirmaron que las resoluciones 041 y 042 nunca fueron puestas en conocimiento del Consejo Directivo. Sin embargo, la resolución 042 sí incluyó algunos de los puntos que se habían discutido en el Consejo, como una "asesoría" de la Contraloría.
La resolución también dice que se implementarán mecanismos de veeduría ciudadana y control social, "a cargo de organismos independientes de reconocida reputación y solvencia moral, designados por el Consejo Directivo".
Pero dos semanas después de la emisión de estas resoluciones, la vocal de los afiliados, Mercy Maldonado, fue cesada tras una inhabilitación de la Superintendencia de Bancos, dirigida por Roberto Romero, primo de Édgar Lama.
La veeduría, mientras tranto aún no se concreta. Aunque la emergencia está en marcha desde septiembre, recién la noche este 22 de octubre el IESS lanzó una convocatoria pública para conformarla. La Comisión Nacional Anticorrupción reaccionó, señalando que una convocatoria "a esta altura, cuando el proceso está en marcha, solo es una forma de cubrir lo actuado".
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