Creatividad, emprendimiento y desafíos: migrantes ecuatorianos y sus historias de negocios en Estados Unidos
Ecuatorianos en Estados Unidos impulsan negocios que reflejan su cultura y visión empresarial, parte del creciente emprendimiento latino que genera empleo y dinamiza la economía.

Suany Baca, emprendedora ecuatoriana. Tiene un negocio de pasteles personalizados en Nueva York.
- Foto
Cortesía
Autor:
Actualizada:
Compartir:
NUEVA YORK. En ciudades como Nueva York y Nueva Jersey cada vez más ecuatorianos están dejando su huella a través de negocios que combinan talento, cultura y visión empresarial. De acuerdo al último informe de la Stanford Latino Entrepreneurship Initiative 2024, los negocios de latinos crecieron un 44 % entre 2018 y 2023, generando más de 650.000 millones de dólares en ingresos y empleando a más de 3,5 millones de personas. Este contexto de crecimiento ha abierto espacio para que historias como las de Lucy y Suany, dos emprendedoras ecuatorianas, inspiren a otros migrantes a creer que el “sueño americano” también puede construirse desde cero.
Lucy Argudo explica que decidió entrar en el negocio de tablas de quesos porque “siempre me ha gustado organizar reuniones en casa cuidando cada detalle… pasé de hacer una mesa para 50 personas a una para 500”. Como fotógrafa, la sensibilidad estética de esta guayaquileña la llevó a montar mesas únicas, nacidas de escuchar a los clientes y de no tener un modelo estándar: Cada creación surge con la inspiración del momento. Añade que, en un mercado tan competitivo, “la determinación y las ganas prevalecieron y nada me detuvo”.
Suany Baca descubrió su pasión por la repostería en la universidad. Con el tiempo, esa afición llevó a esta quiteña a tomar varios cursos y a perfeccionar sus técnicas, hasta que amigos y conocidos comenzaron a pedirle postres para sus eventos. El punto de inflexión llegó cuando preparó los postres para una boda y tuvieron gran aceptación, lo que impulsó el despegue de su negocio. Reconoce que “lo más desafiante fue vencer el miedo… sabía que entraba a un mercado muy retador” pero, las reacciones positivas y las recomendaciones la motivaron a seguir adelante. Entre sus proyectos más memorables destaca una torta gigante en forma del edificio Empire State, Red Velvet y con luces, diseñada para 500 personas: ‘más grande que yo’, recuerda con orgullo. “No hago solamente postres, sino piezas que cuentan historias”, afirma.
Emprendimientos con necesidad de asesoría
Los casos de Lucy y Suany ilustran un fenómeno creciente. Según el centro de investigación Brookings Institution, entre 2017 y 2022 los negocios latinos crecieron a un ritmo anual del 7,7 %, mucho más rápido que el promedio de otras empresas. Este auge ha generado miles de empleos e ingresos adicionales para la economía estadounidense.

En este contexto, los espacios de asesoría comunitaria cumplen un rol clave para quienes buscan emprender. El Consulado del Ecuador en Nueva York ha comenzado a incluir en su agenda actividades que van más allá de los servicios consulares tradicionales. Durante la feria de emprendimiento realizada el 30 de julio, cerca de 200 personas acudieron en busca de orientación para formalizar sus negocios, entender procesos legales o acceder a financiamiento inicial. Según explicó el cónsul José Zambrano, el objetivo es que “la comunidad cuente con información confiable y con los recursos necesarios para abrir o hacer crecer sus negocios en Estados Unidos”.
Parte de este esfuerzo se logra gracias a alianzas con organizaciones como Ariva, con sede en el sur del Bronx, que cuenta con un asesor permanente en el consulado. Dicha entidad ofrece programas de educación financiera y asesorías, para que la comunidad pueda acceder a capital semilla y desarrollar sus proyectos. En esta feria, también participaron organizaciones como Qualitas y La Jornada, que brindan mentoría empresarial, asesoría legal y acompañamiento a nuevos emprendedores.
Además de este tipo de eventos, el consulado ha impulsado actividades educativas y culturales: paneles sobre acceso a la universidad en Estados Unidos, ferias académicas con 21 universidades de Ecuador y Nueva Jersey, y la creación de un centro de apoyo de la Universidad Estatal de Milagro, que ofrece educación gratuita de pregrado y becas de posgrado. A ello se suman talleres sobre inteligencia artificial, derechos laborales, acceso a vivienda y actividades culturales que conectan a la diáspora con sus raíces.
Financiamiento, otra necesidad clave
Pese a estos apoyos, el acceso al financiamiento sigue siendo un desafío. De acuerdo con la Stanford Latino Entrepreneurship Initiative, solo el 21 % de los emprendedores latinos obtienen financiamiento completo para sus proyectos, frente al 40 % de los empresarios estadounidenses. Gran parte del capital proviene de ahorros personales o préstamos informales, y las solicitudes bancarias y de capital de riesgo son rechazadas con mayor frecuencia.
Lucy Argudo subraya un mensaje clave para quienes dudan en emprender: “Lanzarse, el miedo siempre va a estar, pero si no lo haces nunca sabrás si funcionó”. Suany Baca coincide y añade: “Cada obstáculo trae una lección; si crees en tu talento y trabajas con el corazón, los resultados llegan”.

Estas dos emprendedoras, así como otros miles de microempresarios, muestran que el “sueño americano” no es solo una aspiración laboral, sino una construcción activa: una historia de identidad, creatividad y comunidad. Desde la estética de una mesa de quesos hasta la arquitectura comestible de un pastel, los ecuatorianos en Estados Unidos están demostrando que el éxito también puede construirse con pasión, perseverancia y redes de apoyo sólidas.
Compartir: