En Tungurahua dos mujeres halladas sin vida en menos de 24 horas

El hallazgo de dos mujeres sin vida en menos de un día ha generado conmoción en Tungurahua. Uno de los casos ocurrió en Quero, donde el cuerpo de una joven en estado de descomposición fue encontrado en una quebrada, mientras que en Ambato, una mujer fue hallada suspendida de una puerta en pleno centro de la ciudad.

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El primer hecho se registró el domingo 2 de marzo, cuando habitantes de la zona alta de Quero, en la vía a Pueblo Viejo, alertaron a las autoridades sobre la presencia de un cuerpo en una quebrada.

Al llegar al sitio, agentes de Criminalística y la Dinased constataron que se trataba de una mujer con aparentes signos de violencia.

Hasta el momento, la víctima no ha sido identificada. Sin embargo, los investigadores esperan obtener pistas a través de sus tatuajes: mariposas en el antebrazo, una marca en el muslo y otra en el pecho con la inscripción "Gringo 13".

La comunidad se encuentra alarmada por lo sucedido. Rodrigo Perugachi, morador del sector, expresó su preocupación.

“Antes era impensable encontrar estos hechos en nuestros pueblos, pero ahora parece que la violencia ha llegado hasta aquí”.

Rodrigo Perugachi, morador.

Por su parte, Gloria Silva, comerciante de la zona, insistió en la necesidad de mayor seguridad. “Hace falta iluminación y patrullajes en estos sectores. No podemos esperar a que sigan ocurriendo tragedias para tomar medidas”, afirmó.

Horas después, a las 06:30 del lunes 3 de marzo, otro hecho estremeció a la ciudadanía. En la intersección de las calles Olmedo y Quito, en pleno centro de Ambato, vecinos encontraron el cuerpo de una mujer suspendido en la puerta de ingreso a una vivienda.

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Las primeras versiones indican que podría tratarse de un suicidio. La joven habría sido identificada como Diana Fabara, quien trabajaba eventualmente en un local del sector y residía en el sur de la ciudad.

Según testigos, la mujer habría utilizado una chompa para quitarse la vida. Luis Martínez, residente de la zona, relató la impresión que causó el hallazgo. “Fue impactante. Es un llamado de atención sobre la importancia de la salud mental”, comentó.

A su vez, Elena Álvarez, trabajadora del sector, pidió más control en la ciudad. 

“Este tipo de hechos no pueden volverse comunes. Necesitamos más vigilancia, pero también apoyo para quienes puedan estar pasando por situaciones difíciles”.

Elena Álvarez, trabajadora del sector.

La Dinased, Criminalística y la Fiscalía han tomado control de ambos casos para determinar las circunstancias de las muertes y si hubo intervención de terceros.

Mientras las investigaciones avanzan, la comunidad de Tungurahua espera que las estadísticas de muertes disminuyan.