Toyota presentó el SUV para el mercado norteamericano

En términos estéticos, la variante destinada al mercado de los Estados Unidos luce similar a la que se fabrica en la planta brasileña de Sorocaba.

Sin embargo, hay algunos detalles sensibles que solo un ojo entrenado notará: las ópticas presentan detalles naranjas, como exigen las normativas norteamericanas.

Por su parte y al igual que el Corolla Cross del Mercosur, las versiones de entrada calzan llantas de 17 pulgadas, mientras que en la tope de gama el diámetro es de una pulgada más.

Adentro continúan las reminiscencias con el Corolla, sobre todo en la arquitectura de la plancha de abordar.

Respecto al modelo producido en Brasil, los tapizados apelan a tonalidades más claras y un diseño bitono.

Dele un vistazo a este modelo en la fotogalería:

Juguetes tecnológicos de alto nivel

En cuanto al equipamiento, desde la variante de entrada cuenta con central multimedia de 7 pulgadas con sistemas Android Auto, Apple CarPlay y Amazon Alexa. 

Tiene también aire acondicionado y computadora a bordo como lo más destacado.

Por otro lado, a medida que sube en el escalafón encuentra volante revestido en cuero, climatizador automático y cargador inalámbrico para celular.

Como es costumbre en la marca, con sede en Japón, todas las variantes incluyen ADAS como el control de velocidad, crucero adaptativo, mantenimiento de carril y alerta de colisión.

El resto de la gama incorpora alerta de punto ciego y de tráfico cruzado, además de asistente para estacionar.

La mecánica corre por cuenta del conocido 2.0 naftero de 170 CV y 200 Nm de torque, que se acopla a una caja automática CVT con diez marchas reseteadas.

Sin embargo, en Estados Unidos sí existe la posibilidad de elegir un sistema de tracción en las cuatro ruedas, que a su vez incluye un esquema de suspensión trasero independiente, algo que la versión brasileña no ofrece.

Tomado de: Autotest.com.ar