Una decena de bonos y transferencias de efectivo marcaron el aumento de gasto público en 2025
El Gobierno de Daniel Noboa creó bonos nuevos en épocas previas a votaciones, pero también como medidas de compensación por la eliminación del subsidio al diésel.
Imagen referencial de beneficiarias de bonos del Gobierno de Daniel Noboa, septiembre de 2025.
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Flickr Presidencia
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2025 estuvo marcado por un inusitado aumento del gasto público en bonos y transferencias de dinero a determinados grupos de la población, en períodos que coincidieron con procesos electorales en Ecuador.
El año que termina, los ecuatorianos fueron tres veces a las urnas: por la primera vuelta presidencial, en febrero; la segunda vuelta, en abril, y la Consulta Popular y Referéndum, en noviembre.
En marzo de 2024, antes de las votaciones de segunda vuelta, el Gobierno creó Ecuatorianos en Acción, un programa para que personas de 30 años o más hagan trabajos temporales en entidades públicas, con un sueldo de USD 400.
Y unos días antes de la Consulta Popular, el Gobierno anunció un bono de USD 470 para policías y militares, llamado Legado de Honor.
La entrega de nuevos bonos se volvió tan recurrente en 2025, que incluso el Gobierno tuvo que desmentir y alertar sobre casos de posibles estafas.
Por ejemplo, se promocionó un falso 'Bono Mujer' y en redes sociales como Tik Tok proliferaron supuestos links para inscribirse y recibir USD 1.000 de un bono que sí era real, el Incentivo Emprende. No obstante, el Gobierno había dicho que el beneficio solo se otorgaría mediante visitas de funcionarios en territorio.
En total, el Gobierno de Daniel Noboa creó entre noviembre de 2024 y 2025 unos 10 bonos o programas de transferencias de dinero, que están detallados en este cuadro:
Los nuevos bonos se suman a otros programas permanentes enfocado en población vulnerable, que costea el Estado desde hace años, como, el Bono de Desarrollo Humano, la pensión para adultos mayores Mis Mejores Años y el Bono Joaquín Gallegos Lara para personas con discapacidad.
¿Cuál fue el efecto de estos bonos en la economía?
Alrededor de 436.110 personas recibieron estos beneficios en 2025, según lo previsto en la proforma 2025. El programa más grande fue Ecuatorianos en Acción, al que el Gobierno destinó USD 92,5 millones.
Se trataba de un programa dirigido a personas desempleadas que tuvo alta acogida en un año en el que el empleo adecuado en el país se mantiene estancado. Unas 120.000 personas recibieron las transferencias de dinero.
El número de beneficiados de Ecuatorianos en Acción es mayor al de la población vulnerable que recibe bonos como el Joaquín Gallegos Lara. En octubre de 2025, unas 48.452 personas recibieron este bono de USD 240.
José Hidalgo, director de la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes), dice que en 2025 la entrega de bonos pudo ayudar en algo a que haya mayor liquidez en los hogares de quienes los recibieron, pero hay otros elementos que realmente llevaron al país a tener más dólares.
La economía en 2025 tuvo más liquidez debido al envío histórico de remesas de migrantes, al incremento de las exportaciones y a desembolsos de créditos, dice Hidalgo.
Y añade que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) que ha vivido Ecuador en 2025 tampoco es producto de la entrega de más bonos y transferencias en sí. El economista explica que, si bien ha habido más consumo en 2025, esto se debe fue de un año de rebote económico, luego de la recesión de 2024.
Eliminación del subsidio se compensó con bonos
Hidalgo recuerdo que el aumento de bonos también se dio en 2025 porque el Gobierno eliminó el subsidio al diésel.
El 12 de septiembre de 2025, cuando el Presidente Noboa firmó el decreto con el que puso fin al subsidio, también anunció medidas de compensación. Uno fue la entrega del nuevo bono Raíces, un pago de USD 1.000 para unos 100.000 agricultores.
Otra compensación fue para los transportistas. El Gobierno decidió pagarles, durante seis meses, montos que iban entre USD 400 y USD 1.800 al mes y un bono de chatarrización de hasta USD 23.000 para que los transportistas renueven sus unidades.
El presupuesto para financiar estas dos compensaciones es de USD 320 millones, según el Gobierno. Eso equivale a lo que se ha gastado hasta noviembre en la pensión Mi Mejores Años, destinada a los adultos mayores, que fueron USD 324 millones.
Mathias Haas, consultor senior de la empresa Inteligencia Empresarial, explica que cuando los bonos se orientan a mitigar efectos de decisiones económicas más amplias y profundas, por ejemplo, compensar ajustes de precios en el diésel, pueden aportar estabilidad social y económica.
"El desafío no es el déficit por sí mismo, sino la composición del gasto que lo genera".
Mathias Haas
Y agrega que si el déficit está asociado a programas con impacto social verificable o inversiones en proyectos semilla, es positivo y no un déficit originado en "decisiones sin retorno productivo".
El foco debería estar en evaluar por ejemplo, si el bono está bien está focalizado y si existen reglas claras para su financiamiento, dice.
¿Cuánto ha aumentado el gasto en bonos?
El Ministerio de Finanzas no ha publicado todavía el detalle del gasto que se ha hecho en estos 10 nuevos beneficios, pero al revisar el Presupuesto del Estado se puede ver que algunas cuentas, que son las que suelen agrupar este tipo de gastos, tienen aumentos.
Por ejemplo, se registra un incremento de gasto en la cuenta de Transferencias Corrientes, en la que consta, por ejemplo, el Bono de Desarrollo Humano y el bono para los transportistas por eliminación del subsidio a los combustibles.
Entre enero y noviembre de 2024, el gasto en esta cuenta fue de USD 4.256 millones, pero en 2025 subió a USD 5.201 millones en iguales meses.
Otra cuenta en la que se suele registrar este tipo de gastos como bonos y transferencias, pero que no son permanentes y se suelen financiar con endeudamiento, es la que se conoce como Transferencias para la Inversión.
El gasto público en esa cuenta fue de USD 143 millones, entre enero y noviembre de 2024. Y para igual período de 2025 aumentó a USD 347 millones.
Esto es más del doble de aumento, debido a que en este grupo está, por ejemplo, el nuevo programa Jóvenes en Acción.
Entre enero y noviembre de 2025, el Gobierno ya ha gastado USD 62,2 millones en el programa Jóvenes en Acción, de una asignación de USD 96 millones para todo el año.
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