Del silencio al rechazo, la izquierda de América Latina está desconcertada por el premio Nobel para María Corina Machado
El peso simbólico del premio Nobel de la Paz es innegable, por eso los representantes de la izquierda de América Latina lucen estupefactos ante el galardón para la opositora venezolana.

La opositora venezolana María Corina Machado en un acto público, el 9 de enero de 2025 en Caracas.
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AFP
Autor:
Redacción Primicias
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El premio Nobel de la Paz para la opositora de derecha María Corina Machado ha resonado dolorosamente en la izquierda de América Latina, en especial en aquella que apoya a la dictadura de Nicolás Maduro en Venezuela.
No es para menos. El prestigio del premio Nobel, en especial el dedicado a la Paz, es de alto simbolismo pues otorga una fuerza moral y autoridad inmensa a los galardonados, lo que puede amplificar su voz y protegerlos en situaciones difíciles (como en el caso de activistas encarcelados).
No obstante, a la izquierda de América Latina le ha sentado mal que la lideresa de la oposición de Venezuela, María Corina Machado, haya sido galardonada. Los principales líderes del llamado Socialismo del Siglo XXI, o han callado, o han intentado deslegitimar a la venezolana.
La dictadura de Cuba se pronuncia
El primero fue el dictador de Cuba, Miguel Díaz-Canel, que calificó “vergonzoso” el otorgamiento del Nobel de la Paz 2025 a Machado y criticó la “politización” del comité noruego de estos galardones.
“La politización, parcialización y desprestigio del Comité Noruego del Nobel por la Paz ha alcanzado límites insospechados”, apuntó Díaz-Canel en varios mensajes en sus redes sociales.
“Rechazamos firmemente esta maniobra política que intenta singularizar a Venezuela y minar su liderazgo bolivariano, encabezado por su presidente legítimo, Nicolás Maduro”, dijo el mandatario cubano.
Críticas de otro Nobel de la Paz
El ganador del Premio Nobel de la Paz de 1980, el izquierdista argentino Adolfo Pérez Esquivel, criticó el premio para Machado. "No estoy de acuerdo, porque este es un premio para neutralizar la situación en Venezuela", dijo Esquivel, un defensor de los gobiernos progresistas de la región y que pide la liberación del exvicepresidente ecuatoriano, Jorge Glas.
"Además, Corina Machado forma parte de la política de Estados Unidos contra el Gobierno venezolano. [Ganó] no porque haya hecho un trabajo a favor de la paz y del pueblo venezolano. Me preocupa que el Comité Nobel haya tomado esta decisión", dijo Esquivel.
Petro pide explicaciones
En su habitual estilo, enredado e inexacto, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, pidió "una explicación" a Machado por una carta que ella le envió en 2018 al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, y al entonces presidente de Argentina, Mauricio Macri, solicitándoles ayuda para restaurar la democracia en Venezuela.
"Lo que no entiendo y quiero que me explique es: ¿Si usted ahora solicita ayuda a un criminal contra la humanidad, con orden de captura internacional, para llevarle democracia a Venezuela?", escribió Petro, tras cambiar varias veces la versión de su hilo por los errores que cometía.
Silencios atronadores
La presidenta de México y aliada del régimen chavista de Venezuela, Claudia Sheimban, se limitó a responder con un lacónico "Sin comentarios" a la pregunta de qué le parecía el Nobel de la Paz para Machado. Y se negó a agregar nada más.
El presidente de Brasil, Lula da Silva, tampoco se ha expresado por el galardón de Machado.
El expresidente de Ecuador, Rafael Correa, se limitó a criticar a Guillermo Lasso por su felicitación a Machado. "Dime quién te felicita y te diré quién eres", escribió Correa, aliado público del dictador venezolano Nicolás Maduro.
Chile, la excepción
La gran excepción dentro de la izquierda ha sido la reacción del Gobierno de Chile. El canciller Alberto van Klaveren expresó esto tras felicitar a Machado: "Ella es la dirigente indiscutida de la oposición venezolana y todos sabemos que la situación en Venezuela es muy compleja, muy dura".
Por su lado, la candidata presidencial del oficialismo, la comunista Jeannette Jara, también respaldo el galardón. "Creo que es un reconocimiento importante, ojalá que impulse prontamente una transición democrática en Venezuela y lo digo porque, a nuestro entender, es importante que podamos restablecer relaciones diplomáticas con Venezuela dado que en Chile hay un impacto en la migración venezolana”.
Tanto el gobierno de Gabriel Boric como la candidata presidencial de su corriente han tomado distancia del chavismo, al que consideran una dictadura.
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