Aunque parezca que la equidad de género empresarial ha incrementado, en América Latina y el Caribe, esta es una lucha que se mantiene.
Un análisis del Instituto para la Integración de América Latina y el Caribe (INTAL) indica que la desigualdad en cuanto a equidad de género se ha reducido a nivel mundial. Pero su completa erradicación sigue siendo persistente y es un problema que debe ser resuelto.
Asimismo, un estudio de BID Invest afirma que la segregación horizontal y vertical, así como la brecha salarial de género, son retos por tomar en cuenta.
Brecha salarial
La brecha salarial basada en el género sigue siendo un indicador persistente de desigualdad entre las mujeres y los hombres en el mundo del trabajo.
De acuerdo con datos de 2021 de las Naciones Unidas, a nivel mundial, las mujeres reciben un pago menor que el de los hombres.
Las mujeres ganan 77 centavos por actividad, mientras que los hombres ganan un dólar en un trabajo de igual valor.
ONU Mujeres
Segregación horizontal y vertical
Si bien la palabra segregación es un término muy escuchado, tal vez le interese saber que existen distintos tipos de esta: horizontal y vertical. Cada uno de estos afecta a las mujeres en el mundo empresarial de distinta manera.
- Segregación horizontal: Hace referencia a que las mujeres se concentran en ciertos sectores de actividad, con ocupaciones determinadas. Por ejemplo, dentro del ámbito de servicios hay más mujeres, mientras que en el sector industrial hay más hombres. Esto deja en evidencia que, aún en este tiempo, existen sectores tradicionales feminizados, hecho que dificulta a las mujeres el acceder a cargos generalmente “masculinos”.
- Segregación vertical: Esta supone el trato desigual en cuanto a la escala jerárquica, concentrando los empleos femeninos en escalas inferiores. Aunque, es importante mencionar que, según la Organización Internacional del Trabajo, desde 1991, las mujeres se han incorporado a cargos directivos con rapidez, especialmente en países de altos ingresos.
Sin embargo, datos indican que falta mucho para que las mujeres estén en igual número que los hombres en esos cargos. Además, cuanto más grande es una empresa, menos probabilidades existen para que las mujeres accedan a cargos importantes.
Es fundamental recalcar que el liderazgo femenino tiene un impacto positivo para el resto de las mujeres dentro de la empresa. Pues se ha comprobado que las líderes femeninas en posiciones altas guían y empoderan a otras mujeres en su carrera profesional.
Las mujeres gerentes ayudan a otras mujeres a ascender en un 44%.
Organización Internacional del Trabajo
Adicionalmente, de acuerdo con cifras de Deloitte 2022, las organizaciones inclusivas y solidarias obtienen una ventaja competitiva. Esto debido a que las empresas reportan altos niveles de compromiso, confianza y satisfacción profesional.
Más allá del techo de cristal de la jerarquía empresarial
Casi el 75% de las empresas del mundo aplican políticas de igualdad de oportunidades, diversidad e inclusión. Sin embargo, un estudio realizado por la Organización Internacional del Trabajo, indica que la aplicación de políticas no es lo único que se puede hacer para solucionar el desequilibrio de género, en los niveles máximos empresariales. De hecho, es importante tomar en cuenta los siguientes aspectos para el bienestar integral de las mujeres:
- Encontrar opciones para que el trabajo flexible funcione para las mujeres
- Hacer del bienestar mental una prioridad
- Enfocar el trabajo híbrido con base en la inclusión y la flexibilidad
- Inculcar una cultura verdaderamente inclusiva
- Abordar el tema del agotamiento mental
