Librerías y actividades artísticas sin público ya tienen protocolos

Actualización 10:15 del 04/06/2020 con el protocolo de bioseguridad de librerías y editoriales.

Las regulaciones están listas y aprobadas por el Comité de Operaciones de Emergencias (COE) Nacional y con eso, junto al paso al semáforo amarillo en Quito, algunas actividades culturales recuperan sus funciones.

Por ejemplo, desde este miércoles 3 de junio ya hubo librerías abiertas en la ciudad.

Esto porque el COE Nacional aprobó una serie de protocolos para el funcionamiento de librerías y editoriales, así como para los trabajadores del campo del tatuaje y de la producción de actividades artísticas, sin la presencia de público.

Lo último hace referencia a grabaciones audiovisuales y musicales que se pueden hacer en salas de teatro, de conciertos, sets, estudios y otros espacios similares.

Estos protocolos fueron "presentados por el Ministerio de Cultura y Patrimonio y validados por las Mesas Técnicas de Trabajo que conforman la plenaria del COE nacional".

Así lo señala la resolución firmada por Rommel Salazar, director general del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias, así como el Secretario del COE Nacional.

Sin embargo, al buscar los protocolos en la página oficial de la Gestión de Riesgos, se pueden encontrar los que están enfocados al tatuaje y a las actividades artísticas sin la presencia del público.

Los que definen las medidas de bioseguridad para librerías y editoriales, las resoluciones del COE hablan de que deberían ser implementadas "al momento e su apertura", no aparecieron en la página al mismo tiempo.

Recién este 4 de junio, el protocolo fue publicado.

Entre los lineamientos que se encuentran en el documento se puede leer:

• • Toma de temperatura al ingreso.
  • Desinfección de calzados.
  • Limpieza constante de los locales.
  • Activación de preventas y de citas para asistencia.
  • Realizar entregas a domicilio. Personal de entrega con todas las seguridades.
  • Limpieza en el manejo de dinero

Lineamientos de seguridad para actividades artísticas sin público

En un documento de 11 páginas se define el protocolo para actividades artísticas sin público "del sector musical y de artes escénicas". Esto involucraría a:

"Artistas, productores, técnicos, operarios de equipos, propietarios y administradores de espacios (interiores o exteriores), estudios de grabación o locaciones, personas dedicadas al transporte y manipulación de equipos y herramientas necesarias para el montaje y adecuación de escenarios".

Entre los lineamientos que se deberán tomar en cuenta se encuentran:

• • Medidas higiénicas generales (uso de mascarillas, lavado de manos cada tres horas, distanciamiento social de al menos dos metros, no tocarse el rostro, dispensadores de alcohol y gel, recogerse el pelo en caso de llevarlo largo, limpieza de equipos y superficies, etc.).
  • Registro de las personas que serán parte de la actividad.
  • Limpieza y desinfección del espacio antes de las actividades
  • Respaldo del servicio de desinfección realizado (contrato o factura).
  • Mecanismo de desinfección de calzado.
  • Adecuada ventilación de los espacios.
  • Toma de temperatura de todos los presentes.
  • Prohibición de consumo de alimentos en camerinos y zonas comunes.
  • Cronograma de actividades en caso de necesitarse más sesiones.
  • El número máximo de asistentes dependerá de la capacidad del lugar y que permita mantener la distancia social de dos metros a la redonda por persona.

En el caso de trabajos artísticos en locales de tatuajes, las medidas que se piden son de mayor higiene, de esterilización de equipos y de vacunas para quienes realicen los trabajos, entre otras indicaciones.

Las librerías abiertas

Si bien hubo demora en la publicación de los protocolos aprobados por el COE Nacional, el semáforo amarillo que empezó a regir desde el 3 de junio en Quito, significó la apertura de librerías.

Que pueden funcionar con un aforo del 30% de su capacidad.

Han sido 77 días complicados para estos negocios. Esto lo sabe Daniel Acosta, que está a la cabeza de la librería y cafetería Tres Gatos.

"Prácticamente es empezar desde cero todo, e inclusive valorar la finalización abrupta o no del proyecto cultural. Económicamente más de dos meses de paralización representa pérdidas que nadie podía prever".

Si bien buscaron mantenerse con un servicio a domicilio todo este tiempo, la venta de libros no fue sostenida ni exitosa. En el camino se han gestionado alternativas -Tres Gatos es parte del proyecto Enjambre, junto a otras librerías y editoriales independientes- y a fines de junio, la librería tendrá lista su página web oficial.

Pero la experiencia es la presencia física. Y por eso se han reforzado las medidas de seguridad:

"Tenemos el distanciamiento de dos metros, la toma de la temperatura al ingreso de las personas, el uso obligatorio de gel, desinfección de calzado, entre muchas otras cosas".

Daniel Acosta

Acosta asegura haber participado en una reunión promovida por el Ministerio de Gobierno, en la que se les informó las normas que debían cumplir para evitar clausuras y sanciones.

"Eran instrucciones en general para todos los locales comerciales, nada específico para un espacio cultural y menos un cafélibro", dice.

Además, por el contacto con varios colegas -a través de chats- Tres Gatos ha recibido distintos reglamentos, como de los ministerios de Turismo, Salud, el Municipio de Quito y la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria.

La idea es que la gente retorne a los espacios, a los locales, a los libros.