Sábado, 04 de mayo de 2024
Firmas

El cambio climático, la inversión extractiva y la sociedad

José Xavier Orellana Giler

José Xavier Orellana Giler

Graduado de la Escuela de Negocios Darden de la Universidad de Virginia, socio de la firma ecuatoriana de estrategia y finanzas corporativas Ahead Partners, exasesor McKinsey and Company y ex VM de Comercio Exterior.

Actualizada:

28 Jul 2021 - 19:00

El diario Le Monde titula un artículo reciente como el cambio climático va a desbalancear a la Humanidad indicando que este sería el mayor desafío del siglo XXI.  

El calentamiento global ligado a las actividades humanas es algo conocido desde hace ya unos 40 años.  El cambio climático está sucediendo y se intensificará en el futuro y tiene causas e implicaciones económicas y sociales mundiales. 

Nuestro estilo de vida junto con el desarrollo tecnológico dejan una huella ecológica; por ejemplo, al analizar el ciclo de un teléfono móvil de 200 gramos (cuya vida útil es de 10 años, pero que se cambia cada dos a tres años) este requiere que se extraigan 200 kilogramos de material y es su fabricación que genera tres cuartos de su huella de carbono.

Ciertos cambios requerirán soluciones más allá del marco del estado-país (supranacionales).  

The Guardian en un artículo titulado 'Amazon rainforest now emitting more CO2 than it absorbs', indica que ahora ese biosistema emite un millardo de toneladas de dióxido de carbono al año, principalmente por incendios forestales provocados con el propósito de incrementar la producción de carne y soya. 

El Amazonas normalmente debería ser un repositorio de CO2 no una fuente. "Un Acuerdo Global para el Amazonas será necesario" señala un personero de la Agencia Espacial de Brasil. 

En Ecuador, los bancos comerciales europeos ING, BNP Paribas, Credit Suisse, y Rabobank bajo presión de activistas han suspendido el financiamiento de exportaciones de petróleo extraído del Amazonas.   

En esta generación en Ecuador entraremos a la economía post petrolera. Wood Mackenzie, McKinsey and Company, British Petroleum (BP), la International Energy Agency (IEA), y la misma OPEP estiman que la demanda global de petróleo alcanzará un pico de alrededor de 120 millones de barriles diarios en la década de 2030. 

Con el pico de la demanda los precios se estabilizarán con una tendencia a la baja permanente en el largo plazo. 

Esto no significa que el mundo dejará de usar petróleo, pues seguirá siendo un insumo importante desde la industria petroquímica hasta la movilidad y la logística, especialmente en África, Latinoamérica y el subcontinente indio. 

Pero este no será el caso en los países desarrollados (>75% del PIB Global) como la Unión Europea, Estados Unidos, Reino Unido, Corea del Sur o Japón.

En Ecuador los sectores petrolero y minero atraen inversión, pero las restricciones medioambientales y otras aumentarán.  

Y el petróleo que no explotemos en las próximas décadas se quedará bajo tierra. 

BIZBROKER:

La ONG CERES, que coordina al Investor Network on Climate Risk, una red de más de 115 inversionistas institucionales, con activos equivalentes al 13% del PIB mundial, encontró que accionistas activistas comprometerán a las empresas a considerar el cambio climático.

Las opiniones expresadas por los columnistas de PRIMICIAS en este espacio reflejan el pensamiento de sus autores, pero no nuestra posición.

Comentarios

REGLAS para comentar 
Suscribir
Notificación de
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos