El ciclista neerlandés del Ineos Grenadiers alcanzó la victoria más importante de su carrera, en cinco horas y 37 minutos. Wout Van Aert y Stefan Küng completaron el podio.
Van Baarle firmó su sexto triunfo como profesional y primer Monumento. El corredor de 29 años hizo un trabajo impecable desde los primeros kilómetros de la carrera.
"Es increíble, solo cuando me vi entrando solo al velódromo creí que podía ganar. Tenía rivales muy fuertes. Quiero agradecer a mi equipo por un día fantástico y ahora a disfrutar de esto", declaró Van Baarle.
El movimiento ganador se efectuó en el tramo adoquinado de Camphin en Pevele (1,8 km), donde atacó Van Baarle con una fuerza descomunal, abriendo hueco a cada pedalada.
La París-Roubaix tuvo 30 sectores adoquinados que sumaron 54,8 kilómetros de “pavé”, algunos catalogados de ‘cinco estrellas’, como el Arenberg (a 96 km de meta), siempre la primera gran criba; Mons-en-Pévèle (a 49 km) y el Carrefour de l’Arbre (a 17 km).
Por otra parte, el Ineos cierra una semana excepcional, después de los triunfos de Daniel Felipe Martínez en la Itzulia, Kwiatkowski en la Amstel, Sheefield en la Flecha Brabanzona y ahora el premio mayor en la París Roubaix.