Viernes, 26 de abril de 2024

Los Pozo y los Rodríguez comparten una sola pasión: el ciclismo

Autor:

Martha Córdova

Actualizada:

17 Jul 2022 - 0:05

Dos parejas de hermanos se han coronado como campeones de la Vuelta Ciclística al Ecuador, un evento que se disputa desde 1966.

Pedro Rodríguez, Hipólito Pozo, Jaime Pozo y Franco Rodríguez, ganadores de la Vuelta al Ecuador en distintas ediciones.

Autor: Martha Córdova

Actualizada:

17 Jul 2022 - 0:05

Pedro Rodríguez, Hipólito Pozo, Jaime Pozo y Franco Rodríguez, ganadores de la Vuelta al Ecuador en distintas ediciones. - Foto: Primicias

Dos parejas de hermanos se han coronado como campeones de la Vuelta Ciclística al Ecuador, un evento que se disputa desde 1966.

Jaime Pozo tiene la cordialidad y la simpatía de un buen carchense. "El sueño de todo niño es la bicicleta, aquí no pensamos en balones", dice el ganador de tres ediciones de la Vuelta al Ecuador: 1967, 1971 y 1972.

La primera edición la ganó su hermano, Hipólito. Sin embargo, don Jaime, hoy con 76 años, recuerda que él fue el primer líder de las vueltas a Ecuador y que ganó la clasificación de montaña en las cinco ediciones en las que participó, por esa capacidad para trepar ágilmente era conocido como 'La Ardilla'.

Jaime lideró esa primera vuelta desde la primera etapa hasta la penúltima. Solo en la última fue superado por su hermano Hipólito, que era muy veloz en los descensos.

Jaime, en cambio, se destacaba como escalador. Aprendió a pedalear desde niño. Nació en Chapuel, en la vía a Tufiño, en Carchi.

Cada día llegaba en su bicicleta a la escuela Sucre, en el centro de Tulcán. Para ir y regresar de la escuela hacía a diario unos 50 kilómetros, por caminos de tierra, bordeando los sembradíos.

Y con la bicicleta también cumplía con los mandados a la tienda o a la entrega de pan, porque su madre tenía algunos clientes.

Los hermanos Hipólito y Jaime Pozo, durante una competencia.

Los hermanos Hipólito y Jaime Pozo, durante una competencia.  

Compartía la bicicleta con su hermano mayor, Hipólito, quien hoy vive en Ibarra.

Hipólito era el mayor de seis hermanos y fue el que empezó a competir por inspiración, empujado por los periodistas colombianos que llegaron a Tulcán para cubrir una etapa de la Vuelta a Colombia, que en 1955 partió desde esa ciudad.

Hipólito era muy metódico en su preparación como ciclista y resultó varias veces seleccionado nacional.

En el desayuno le pedía a su esposa, Carmita, un batido de sangre de hígado. Proteína para reconstruir los tejidos en la masa muscular.

Estudiaba entre lunes y viernes y el fin de semana hacía mandados, hasta que juntó 120 sucres, la moneda de ese entonces, para comprar el 'caballito de acero'.

Hipólito y Jaime fueron hasta Pasto para comprar las bicicletas Monark con las que participaron en esa primera Vuelta en 1966.

Cada una costó 1.000 sucres, y, por consagrarse campeón, el mayor de los hermanos Pozo recibió 5.000 sucres.

La anécdota aquella, de "Gracias a radio Ondas Carchenses por la entrevista", es cierta. Don Jaime relata, con singular picardía, que tras un accidente que sufrió su hermano cayó y quedó inconsciente.

Cuando los paramédicos le dieron oxígeno, Hipólito reaccionó y mencionó la famosa frase: "Gracias a Radio Ondas Carchenses por la entrevista", pensando que lo que le estaban poniendo sobre el rostro era un micrófono y no una máscara.

Arriba: Franco Rodríguez, Jorge Montenegro, Pedro Rodríguez, Paulo Caicedo, Héctor Chiles. Abajo: Hipólito Pozo, Julio Imbacuán, Nelson Polivio Dávila, Jaime Pozo y Carlos Montenegro, en el primer Encuentro por el Ciclismo.

Arriba: Franco Rodríguez, Jorge Montenegro, Pedro Rodríguez, Paulo Caicedo, Héctor Chiles. Abajo: Hipólito Pozo, Julio Imbacuán, Nelson Polivio Dávila, Jaime Pozo y Carlos Montenegro, en el primer Encuentro por el Ciclismo. Cortesía En Bici.

Pedro y Franco

Los Rodríguez jamás se han alejado del ciclismo. Después del retiro, incursionaron en la importación de bicicletas y otros artículos deportivos.

Pedro es el mayor. Ganó cinco ediciones de la Vuelta a Ecuador, en un hecho inédito para el ciclismo nacional: 1988, 1990, 1991, 1993 y 1995. Franco Rodríguez lo hizo en 2003.

Aprendió a montar en bicicleta a los ocho años, gracias a un regalo de su padre. A los 14 años se inscribió para los torneos intercolegiales y triunfó en todos, por eso lo conocían como 'Pedro el Cruel'.

Se graduó de bachiller en el colegio Vicente Fierro y tenía planeado ingresar a la Politécnica Nacional, pero todo cambió cuando pasó a formar parte del equipo de ciclismo de la Policía Nacional.

Esa escuadra le permitía a Pedro trabajar en sus filas y entrenar. Con él también ingresaron Raúl Cárdenas, Estuardo Pailacho, Segundo Cárdenas y Rodrigo Villarreal.

Pedro Rodríguez corrió las primeras vueltas a Ecuador en el equipo de la Policía Nacional. Luego fichó por los equipos colombianos Pony Malta-Avianca. También cambió su apodo. Empezaron a conocerlo como 'El Águila'.

La pasión por el ciclismo, dentro de la familia Rodríguez Rosero, también la heredó Franco, quien formó parte del equipo policial, y fue gregario en algunas carreras.

Los hermanos Franco Rodríguez y Pedro Rodríguez, en un homenaje que les hizo la Policía Nacional en Tulcán.

Los hermanos Franco Rodríguez y Pedro Rodríguez, en un homenaje que les hizo la Policía Nacional en Tulcán.  

Franco Rodríguez, el menor de los hermanos ciclistas, contó con el respaldo de Pedro y toda su experiencia.

Desde los 12 años comenzó a practicar y los intercolegiales fueron sus primeros eventos en una bicicleta que preparó 'El Águila'.

En 1991, Pedro y Franco compartieron equipo, participaron en la Vuelta a Colombia, junto con Juan Carlos Rosero, Genary Pozo y Héctor Chiles.

Franco incursionó por primera ocasión en la Vuelta a Ecuador en 1992, con solo 19 años. Se retiró luego de la undécima etapa, hasta entonces se desempeñó como gregario de su hermano Pedro, en el equipo de la Policía Nacional.

Para 2003 llegó con total madurez. Ganó el prólogo y durante las 10 etapas vistió la camiseta de líder de la clasificación general.

Hoy Franco –de 51 años- tiene un local en el centro de Tulcán, donde vende bicicletas que importa su hermano Pedro.

'El Águila', de 56 años de edad, está radicado desde hace algunos años en Imbabura y es representante de una importante fábrica de bicicletas.