Un empresario había aceptado que otras entidades pagaron servicios que prestó a Alianza PAIS. Pero en el juicio, según la Fiscalía, se retractó.
Nota actualizada a las 15:35 con la decisión del Tribunal sobre el testigo que la Fiscal pidió que sea declarado hostil.
Durante la quinta jornada del juicio por el caso Sobornos 2012-2016, la Fiscalía General del Estado llamó al estrado a varios nuevos testigos.
En primer lugar fue llamado Ernesto Guerrero, representante de la empresa Eco Sonido. En su versión libre y voluntaria él había aceptado que prestó servicios a Alianza PAÍS, pero bajo juramento se contradijo.
Ante esta situación, la fiscal Diana Salazar solicitó que se lo declare testigo hostil e Iván León, juez ponente de la causa, pidió que sea retirado de la sala de audiencia con resguardo policial.
Cuando la audiencia se reinstaló en la tarde, tras una breve deliberación, el Tribunal del juicio decidió liberar al testigo al determinar que no hubo la contradicción denunciada por la Fiscalía.
En la jornada matutina también declaró Santiago Carrera, representante de otra empresa que realizó trabajos audiovisuales para Alianza PAIS en la campaña de 2014.
Según su testimonio, los haberes fueron cancelados por las empresas Consermin, Hidalgo & Hidalgo y TGC, cuyos representantes también forman parte de los 21 procesados por cohecho en el caso.
También se presentó Pedro Espinosa, exasesor de Alexis Mera, exsecretario jurídico de la Presidencia. El propio Mera pidió contraiterrogar al testigo.
Espinosa ratificó, ante las preguntas de Mera, que le entregó los sobres que supuestamente contenían el dinero de los sobornos al propio Mera, en su despacho de la Presidencia.
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