Viernes, 26 de abril de 2024

Ecuador tendrá que renovar equipos para poder erradicar la malaria hasta 2025

Autor:

Jonathan Machado

Actualizada:

3 Feb 2023 - 5:28

El Ministerio de Salud reconoce que no es una tarea fácil, pues los equipos destinados a controlar la malaria cumplieron su vida útil hace 10 años.

Un funcionario del Ministerio de Salud en una jornada de fumigación contra la malaria, el 21 de enero de 2023 en Guayaquil.

Autor: Jonathan Machado

Actualizada:

3 Feb 2023 - 5:28

Un funcionario del Ministerio de Salud en una jornada de fumigación contra la malaria, el 21 de enero de 2023 en Guayaquil. - Foto: Ministerio de Salud

El Ministerio de Salud reconoce que no es una tarea fácil, pues los equipos destinados a controlar la malaria cumplieron su vida útil hace 10 años.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) identificó a Ecuador como uno de los 18 países en el mundo que tienen la capacidad de eliminar la malaria hasta 2025.

El organismo llegó a esta conclusión porque el número de pacientes con esta enfermedad se ha mantenido estable entre 2018 y 2022, con menos de 2.000 casos anuales.

Según el Ministerio de Salud, 2021 fue el año con el número más alto de contagios, cuando se registraron 1.974; mientras que en 2022 hubo 1.214.

Julio Rivera, especialista de enfermedades infecciosas del Ministerio de Salud, dice que la baja prevalencia que tiene la malaria en Ecuador "llamó la atención de la OMS e invitó al país para que alcance la certificación de la eliminación de la malaria".

Hasta ahora, el país ha logrado controlar la enfermedad con dos estrategias:

  • Entrega de medicamentos en las zonas afectadas, sobre todo, en las provincias de la Amazonía, donde está la mayoría de los casos.
  • Entrega de mosquiteros certificados por la OMS para evitar la propagación de la enfermedad. "El mosquito que causa la malaria solo pica en las noches o en las madrugadas y, por eso, es fundamental la entrega de los toldos", dice.

No es una tarea fácil

El Ministerio de Salud reconoce que la malaria es una enfermedad que puede propagarse rápidamente si no existe un control adecuado.

Julio Rivera, del Ministerio de Salud, recuerda que en 1998 el país soportó uno de los peores brotes de malaria con más de 100.000 casos. Ese año "nos descuidamos y se produjo el aumento de contagios", dice.

Si bien Ecuador ha evitado nuevos repuntes, Rivera admite que eliminar la malaria hasta 2025 no es una tarea fácil.

"El Ministerio de Salud cuenta con maquinaria y equipos que perdieron su vida útil hace 10 años. Por ejemplo, la red de microscopios y las bombas aspersoras que se utilizan para matar a los mosquitos", detalla.

Además, Rivera reclama que en los últimos tres años, el Ministerio no contó con un presupuesto adecuado para el control. "En 2020 vivimos de las donaciones de la Organización Panamericana de la Salud", recuerda.

El vicepresidente de la República, Alfredo Borrero, está consciente que la erradicación de malaria requiere presupuesto. La oferta del Gobierno es invertir, USD 10,8 millones, hasta 2025.

Ese dinero será utilizado para la compra de microscopios, pruebas de diagnóstico y equipos de control de vectores.

Además, se financiará la movilización de las brigadas que viajan hasta la Amazonía para intervenir en las zonas en las que se registre un rebrote.

"El costo diario de una brigada bordea los USD 3.000".

Julio Rivera

El funcionario considera que si el Gobierno ejecuta de manera adecuada ese presupuesto, el país logrará el objetivo de "cero casos" en 2025.

Síntomas de la malaria

Los principales síntomas que presentan las personas infectadas con malaria son:

  • Fiebre.
  • Vómito.
  • Dolor de cabeza.
  • Sudoración
  • Escalofríos, que aparecen 10 a 15 días después de la picadura del mosquito.

El infectólogo Francisco López explica que el tratamiento para combatir la enfermedad incluye medicamentos como cloroquina o primaquina, que solo están en manos del Ministerio de Salud.

"Lo importante es que las personas terminen el tratamiento porque hay algunos pacientes que siguen las indicaciones por un par de días. Se sienten bien y suspenden el tratamiento", dice López.

Estas malas prácticas, señala, pueden provocar otras enfermedades más graves, como insuficiencia hepática en adultos, y desnutrición en los niños.