Las familias transportan los ataúdes en camionetas o amarrados encima de los techos de los vehículos. Para cubrir la demanda de entierros, el horario de atención de los cementerios se amplió en la ciudad.
Desde la tarde del 2 de abril se observa una larga fila de camionetas en los exteriores de Jardines de la Esperanza. Este es uno de los cuatro cementerios privados de Guayaquil.
Se trata de los familiares de fallecidos en los últimos días en la ciudad, quienes esperan por un turno para sepultar a sus seres queridos. Muchos de los ciudadanos optan por llevar los ataúdes en camionetas, ante la falta de servicios de las funerarias.
Para mejorar el trámite de sepultura, el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional ordenó a los cementerios privados ampliar su horario de atención. Las puertas de estos lugares estarán abiertas hasta las 17:00.
Por otra parte, el Gobierno ha indicado que no todos los fallecidos reportados en Guayaquil se deben al coronavirus. Lo que sucede es que por la emergencia sanitaria, el número de personas que mueren al día en la ciudad pasó de 45 a 60.
Uno de los empleados del cementerio realiza la desinfección de los ataúdes y vehículos que ingresan al lugar. Reuters
En los baldes de las camionetas se transportan a los ataúdes hasta los cementerios de Guayaquil. Reuters
Los ataúdes también viajan en los techo de los carros hasta los camposantos. Reuters
Además, Jorge Wated, quien está a cargo de la Fuerza de Tarea Conjunta que recupera los cuerpos de las viviendas, publicó fotografías de las obras que realizan en el terreno donde sepultarán a los fallecidos de Covid-19.
Wated anunció también que el ECU-911 cooperará con la Corporación de Seguridad Ciudadana de Guayaquil (CSCG), entidad del Municipio, en la recolección de datos de los fallecidos. Con eso se pretende agilizar el levantamiento de los cadáveres.
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