Viernes, 26 de abril de 2024

La mitad de quienes tuvieron Covid-19 sufren secuelas de largo plazo

Autor:

Jonathan Machado

Actualizada:

13 Sep 2022 - 5:28

En Ecuador, el 50% quienes se infectaron de Covid-19 sufrieron secuelas, en algunos casos de más de un año, según un estudio de la UDLA.

Autor: Jonathan Machado

Actualizada:

13 Sep 2022 - 5:28

Un paciente poscovid hace ejercicios en un hospital del IESS, el 7 de enero de 2022. - Foto: API

En Ecuador, el 50% quienes se infectaron de Covid-19 sufrieron secuelas, en algunos casos de más de un año, según un estudio de la UDLA.


Para muchos, obtener un resultado negativo en una prueba PCR tras una infección de Covid-19 no resulta una gran noticia. La mitad de quienes se infectaron de este virus sufren secuelas a largo plazo, según un estudio de la Universidad de las Américas (UDLA).

Esta investigación concluyó que el 50% de las personas que tuvieron Covid-19 en Ecuador soportaron, o aún soportan, meses de secuelas relacionadas con la infección. A esta condición también se la conoce como 'long covid'.

El estudio se realizó entre 2.400 personas que se infectaron del virus, quienes respondieron un cuestionario que la universidad aplicó entre abril y julio de 2022.

Juan Izquierdo, investigador que lideró el estudio, dice que las principales secuelas a largo plazo identificadas en el estudio son: cansancio (8,4%), caída del cabello (5,1%), dificultad para concentrarse (5%) y ansiedad (5%).

Izquierdo explica que el 'long covid' también se expresa en otras molestias como tos constante, insomnio o pérdida del olfato y del gusto.

"Hay que recordar que estos síntomas pueden iniciar con el contagio y no desaparecer cuando el paciente da negativo en una prueba PCR", agrega.

La investigación detalla que en la quinta parte de los casos analizados, estas secuelas han causado molestias durante más de un año.

Mujeres, con más riesgos

Otro de los hallazgos de este estudio es que las mujeres tienen mayor probabilidad de desarrollar secuelas de largo plazo. Del total de personas que dijeron haber sufrido 'long covid', el 64% fueron mujeres, sobre todo entre quienes tienen de 20 a 40 años.

"Aún no hay una razón científica que explique esto. Creemos que puede ser porque algunas de ellas tienen una mayor cantidad de la enzima que controla la presión arterial y el Covid-19 ataca a esta enzima", explica.

A este factor se suman otros como padecer enfermedades crónicas o haber tenido una infección grave de Covid-19%.

Secuelas de Covid-19 en mujeres ecuatorianas.

Izquierdo dice, además, que el riesgo de tener secuelas se incrementa en un 700% en pacientes que fueron ingresados en las unidades de cuidados intensivos o en quienes permanecieron hospitalizados más de siete días.

Alejandra Naranjo permaneció 18 días en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Quito Sur a finales de 2020.

Cuando recibió el alta médica no podía caminar ni respirar con facilidad. Durante un mes y medio acudió a terapias de rehabilitación física y respiratoria para recuperar la movilidad y la masa muscular que había perdido.

Incluso hoy, tras casi dos años de haber vencido al virus, Naranjo dice que aún se cansa cuando camina largas distancias.

Secuelas en la altitud

El estudio de la UDLA concluye también que las personas que viven por encima de los 2.500 metros sobre el nivel del mar tienen mayor riesgo de desarrollar secuelas derivadas del Covid-19.

El 72% de quienes aseguraron tener secuelas de largo plazo viven en ciudades de altitud. En ellos, lo más común fue encontrar dolencias como cambios de humor, taquicardia, disminución del deseo sexual e insomnio.

"También encontramos que los habitantes de las ciudades de mayor altitud presentan síntomas antes de quienes viven en ciudades a nivel del mar", agrega.

Esteban Ortiz, profesor de la UDLA, dice que el estudio no logró identificar las razones por las que los pacientes que viven en territorios de mayor altitud desarrollan más secuelas.

"Estamos buscando una razón médica, pero es posible que tenga relación con lo que se conoce como hipoxia o falta de oxígeno en la sangre", puntualiza.

Otra de las conclusiones es que las personas que no se han vacunado tienen mayor riesgo de tener secuelas más graves y de largo plazo.