El ministro del Interior, Patricio Carrillo, solicitó al Consejo de Generales de la Policía que se revise el ascenso de 40 oficiales que se encuentran con juicios por las mismas condiciones. Está dispuesto a salir del cargo si no se localiza a la abogada.
En nuevas declaraciones sobre la desaparición de la abogada María Belén Bernal, en la Escuela Superior de la Policía, el ministro del Interior, Patricio Carrillo, se refirió al caso como un "delito pasional".
Según Carrillo, hubo una descoordinación con Fiscalía en la toma de versión al teniente de Policía, Germán Cáceres, esposo y principal sospechoso de la desaparición de Bernal.
Para el ministro, era clave que hubiese estado uno de los investigadores de la institución para que pueda aportar información de lo que ya había conocido previamente de la escena del delito.
"Este es un delito pasional, es un delito que no se planificó y debió dejar muchos indicios y esos indicios permiten hacer trazabilidad para encontrar culpables y a la persona", señaló en Ecuavisa.
Sobre el presunto hallazgo de la motocicleta de Cáceres en Tulcán, el ministro dijo que hay algunas cosas que no puede revelar. "Estamos siguiendo las pistas, no estamos descuidando nada", aseguró.
También recordó que el Gobierno se ha puesto plazos para encontrar a la víctima y al agresor. "Esos dos resultados tenemos que entregar en el corto plazo a la sociedad ecuatoriana, sino tendremos que salir todos, inclusive el ministro", dijo.
Carrillo reveló que esta semana solicitó al Consejo de Generales que se revise el ascenso de 40 oficiales que se encuentran con juicios por las mismas condiciones o en algunos otros temas.
"La depuración en la Policía es un proceso permanente, no es un discurso", aseguró.
Mientras Fausto Salinas, comandante General de la Policía, recordó en Teleamazonas que en la búsqueda de Bernal participan 200 uniformados de la institución, y que se iniciaron sumarios administrativos a 12 policías desde coroneles hasta sargentos.
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20/09/2022
8:28
Lasso promete que "caerán todas las cabezas necesarias"El presidente Guillermo Lasso prometió que "caerán todas las cabezas que sean necesarias" por el caso de María Belén Bernal, desaparecida hace una semana en la Escuela Superior de Policía cuando iba a visitar a su esposo, el teniente Germán Cáceres.
Lasso dijo "compartir la indignación (de la madre de Bernal) y de todos los ecuatorianos", y recordó que ya dispuso el despido del director de la escuela policial.
También ordenó "una exhaustiva investigación", que involucre no solo a la Policía, sino al Cuerpo de Bomberos e incluso a la Cruz Roja.
Las declaraciones de Lasso se produjeron durante una entrevista con EFE en Nueva York, donde esta semana participa en la Asamblea General de Naciones Unidas.
El presidente dijo que se permitió que los familiares de Bernal participen "en la búsqueda del cuerpo".
Cuando fue consultado si ve posibilidades de hallarla con vida, manifestó que aún no ha "perdido la esperanza", pero que las informaciones llegadas desde la Fiscalía le "generan pesimismo".
Además, recordó que ofreció una recompensa de USD 20.000 a quien contribuya a localizar al teniente Cáceres.
"Es inadmisible que una persona desaparezca en una escuela policial", remarcó.
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