Martes, 23 de abril de 2024

Estudio revela el verdadero impacto ambiental de las hidroeléctricas

Autor:

Nelson Dávalos

Actualizada:

22 Feb 2022 - 0:05

La investigación, publicada en la revista Science, identificó que la construcción de las hidroeléctricas daña el flujo de sedimento, la corriente del agua y las especies amazónicas.

Las obras de captación son parte de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair. Una imagen del 24 de marzo de 2021.

Autor: Nelson Dávalos

Actualizada:

22 Feb 2022 - 0:05

Las obras de captación son parte de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair. Una imagen del 24 de marzo de 2021. - Foto: PRIMICIAS

La investigación, publicada en la revista Science, identificó que la construcción de las hidroeléctricas daña el flujo de sedimento, la corriente del agua y las especies amazónicas.

La deforestación no es la única amenaza para los bosques amazónicos, sus ecosistemas de agua dulce están seriamente impactados por otros factores.

Entre estos se encuentran la pesca descontrolada, la falta de tratamiento de aguas residuales y el aumento de la construcción de hidroeléctricas. De hecho, estas edificaciones causan una gran fragmentación en la conectividad de los ríos, además de un daño ambiental.

Así lo determinó un informe del Panel Científico por la Amazonía (SPA por sus siglas en inglés) en la COP 26 en Glasgow en 2021.

Debido al impacto negativo que sufren los afluentes, un equipo de más de 40 científicos inició un estudio hace tres años para identificar cómo se puede reducir el impacto ambiental en futuras hidroeléctricas.

En entrevista con PRIMICIAS Andrea Encalada, coautora del estudio y vicerrectora de la Universidad San Francisco de Quito (USFQ) dice que "no solo investigamos el efecto que tienen las hidroeléctricas, sino que si tenemos que construir más cómo lo hacemos de una manera que tenga menos impacto para los seres humanos y para el ambiente".

"El problema es que siempre son considerados como proyectos verdes, pero en realidad tienen muchos problemas ambientales", añade.

El estudio, publicado en la revista Science, identificó que la construcción de estas obras daña el flujo de sedimento y el flujo en general del agua.

Además, la fragmentación del sistema fluvial impacta sobre los organismos que viven ahí.

350 hidroeléctricas estudiadas

Los investigadores analizaron 350 represas hidroeléctricas (ya construidas o en proyectos) de cinco países de la cuenca amazónica: Brasil, Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia.

El estudio concluyó que la expansión energética descoordinada ha resultado en la pérdida de los servicios ecosistémicos, es decir los beneficios de un ecosistema en la sociedad y que mejoran la salud, la economía y la calidad de vida de las personas. 

Encalada dice que las tres hidroeléctricas con un impacto ambiental más grave están en Brasil, en la zona Madeira.

"Tienen grandes problemas sobre todo por la producción de CO2 y la falta de conectividad de peces grandes y esa interrupción en la fragmentación continua del río", explica la experta ecuatoriana.

Pero no son las únicas, en Ecuador Coca Codo Sinclair ha generado un gran impacto en el ambiente. "Tiene un gran impacto en el sedimento. Ya sabemos que en esta cuenca tenemos una erosión extremadamente elevada", dice Encalada.

Según la experta, la obra se construyó en una falla geológica muy joven.

"Sabíamos que íbamos a tener complicaciones, entonces hay un problema desde la concepción de Coca Codo".

Andrea Encalada, Universidad San Francisco de Quito.

Aprender de los errores

El coautor del informe Stephen Hamilton, ecólogo de ecosistemas del Cary Institute of Ecosystem Studies, expresa que "el desarrollo continuo de energía hidroeléctrica en el Amazonas es inevitable"

Entonces, ¿Cómo optimizar la producción de energía al menor costo ambiental? La respuesta se encuentra en la selección estratégica de proyectos, teniendo en cuenta múltiples criterios ambientales que hasta ahora han sido demasiado difíciles de incluir en la planificación de un gran número de proyectos potenciales, explica Hamilton.

Hamilton formó parte de un equipo interdisciplinario de expertos ambientales y computacionales que desarrollaron Amazon EcoVistas. Este equipo analiza colectivamente los proyectos de represa, tanto por su generación de energía como por sus impactos en el medio ambiente. 

Para el análisis se usaron cinco criterios ambientales: flujo fluvial, conectividad fluvial, transporte de sedimentos, biodiversidad de peces y emisiones de gases de efecto invernadero. 

Su herramienta utiliza inteligencia artificial y computación de alto rendimiento para identificar represas hidroeléctricas que cumplan con los objetivos de producción de energía con el menor daño ambiental. 

"Nuestra herramienta nos permite evaluar proyectos hidroeléctricos por sus impactos colectivos en la naturaleza y en las personas a escala de toda la cuenca, un enfoque raro pero crítico, ya que el río Amazonas y sus afluentes fluyen a través de varios países con una topografía diversa", concluye.