Alexis Mera, exsecretario Jurídico de la Presidencia de Rafael Correa, es procesado por presunta asociación ilícita. Una exfiscal de Guayas también está implicada.
El exsecretario Jurídico de la Presidencia en la década correísta, Alexis Mera, no podrá salir del país por orden de la justicia ecuatoriana, que lo investiga por supuesta asociación ilícita, caso en el que también está implicada la exfiscal de Guayas, Patricia Morejón.
La audiencia de revisión de medidas cautelares se realizó en Guayaquil, el 7 de febrero, por solicitud de la Fiscalía, luego de que el juez de la causa no dictara ninguna medida contra Mera cuando fue vinculado al caso, en vista de que ya cumplía una pena por el caso Sobornos.
El proceso se desprende de la pericia de unos chats telefónicos, registrados entre mayo y octubre de 2017, en los que Mera y Morejón discuten sobre casos judiciales abiertos contra funcionarios del régimen de Rafael Correa.
En los mensajes, Mera le recomienda a la exfiscal observar el proceso contra Jonás Gonseth, exdirector del hospital Abel Gilbert Pontón de Guayaquil.
"Hola Patricia. Este es el caso del español, director del hospital Abel Gilbert, que le dije alguna vez. Es un buen hombre. Fallas administrativas cometió, pero jamás peculado", asegura Mera, quien agrega que Gonseth "es apreciado por Rafael Correa".
La entonces funcionaria le responde: "Hola mi doctor querido. Claro que sí, encantada. Ya reviso. Debe haber llegado en consulta. Yo le informo, doctor".
Mera y el caso Sobornos
Mera obtuvo la prelibertad el 27 de enero de 2023, luego de pasar tres años y medio en la cárcel de Ambato, tras ser sentenciado en 2020 a una pena de ocho años de prisión por el caso Sobornos 2012-2016.
El exfuncionario deberá presentarse semanalmente en la Penitenciaría del Litoral y no usará grillete electrónico.
En el caso Sobornos también fueron sentenciados Correa, Jorge Glas, Vinicio Alvarado y otros funcionarios del correísmo, que gestionaban y cobraban sobornos a contratistas del Estado, a cambio de la adjudicación de obras.
Con ese dinero se financiaron las actividades proselitistas de Alianza PAIS.
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