La derrota de Barcelona en el Clásico del Astillero provocó un cruce de trinos en Twitter entre el actual alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, y el dirigente del cuadro amarillo, Rafael Verduga.
Acostumbrado a usar su cuenta personal de Twitter para contestar reclamos y pedidos, ahora el alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, se enfrenta a dirigentes e hinchas de Barcelona.
Todo ocurre tras la derrota del equipo amarillo, por tres goles a uno frente a Emelec en el Clásico del Astillero.
La pérdida del cuadro torero, del cual fue dirigente hasta 2022, provocó que Álvarez escriba: "Entiendan que en el fútbol no puedes tener presupuestos chimichurris, si quieres pelear el descenso, vota por Verduga".
Rafael Verduga es el actual vicepresidente financiero del club y quien se postularía para la presidencia del club en octubre próximo.
Antes aliados y ahora enemistados, el actual alcalde culpa a Verduga de 'chantaje'.
Según Álvarez, Verduga presuntamente concede préstamos para financiar Barcelona, a cambio de que el presidente del club, Carlos Alfaro Moreno, lo apoye en las elecciones del equipo.
"Lánzate y gana solo, con carácter (...) Gana bien, no con maña", agregó Álvarez, quien dedicó todo su domingo a la crisis futbolística de su equipo.
La respuesta de Verduga no se hizo esperar, y nuevamente por Twitter alegó que el alcalde pretende "politizar el momento deportivo del club".
Pero las acusaciones continuaron y esta vez con hinchas y otras personas ligadas a la dirigencia del club.
"¿Cuánto te pagaron por el tweet? Aquí nadie se salva. No trates de posicionarlo como filántropo", le contestó a un usuario en la red social, en referencia a Verduga.
No es la primera vez que Barcelona forma parte de la agenda política de un funcionario público. El propio presidente vitalicio del club es el exalcalde de Guayaquil, el socialcristiano Jaime Nebot.
Y entre 2015 y 2019, el titular del equipo era el exministro del gobierno de Rafael Correa, José Francisco Cevallos.