Jueves, 28 de marzo de 2024

En busca del origen del coronavirus: la OMS inicia su misión en Wuhan

Autor:

EFE

Actualizada:

27 Ene 2021 - 8:28

Autor: EFE

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27 Ene 2021 - 8:28

Edificio del Instituto de Virología de Wuhan, China. 27 de enero de 2021. - Foto: EFE

Los científicos internacionales seguirán la pista de los primeros contagios en Wuhan, relacionados supuestamente con el mercado de pescado y mariscos de Huanan, donde se vendían también animales salvajes.

Un equipo internacional de 13 expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) comienza este 27 de enero de 2021, en Wuhan, su misión sobre el terreno para investigar el origen del coronavirus.

Esto, tras una cuarentena de 14 días en un hotel de la ciudad.

Se trata de una misión complicada, salpicada de retrasos y enfrentamientos entre China y EE.UU.

Pero puede ser clave para investigar, de forma independiente, cómo se originaron los primeros casos conocidos del virus que continúa asediando a la humanidad.

Wuhan fue el primer lugar del mundo en que se identificó el patógeno a finales de 2019.

Ahí los científicos internacionales seguirán la pista de los primeros contagios, relacionados supuestamente con el mercado de pescado y mariscos de Huanan, donde se vendían también animales salvajes.

Todas las hipótesis sobre la mesa

"Todas las hipótesis están sobre la mesa y es demasiado pronto para llegar a una conclusión sobre dónde empezó exactamente el virus, si fue dentro o fuera de China", afirmó el director de emergencias sanitarias de la OMS, Mike Ryan.

El equipo de investigación internacional desplazado a Wuhan, integrado por miembros de la OMS y otros científicos internacionales incluye a expertos de EE.UU., Japón, Rusia, Reino Unido, Holanda, Dinamarca, Alemania, Australia, Vietnam y Catar.

Está encabezado por el danés Peter Ben Embarek, el principal experto en enfermedades de transmisión animal de la organización con sede en Ginebra.

También incluye a otros especialistas de reconocido prestigio.

Entre ellos, la viróloga holandesa Mariom Koopmans, el microbiólogo y veterinario alemán Fabian Leendertz o el zoólogo británico Peter Daszak.

Este último investigó hace años los coronavirus de los murciélagos en China.

Daszak destacó que trabajan para que, en próximas epidemias, los científicos puedan estar sobre el terreno en cuanto se origine un brote para poder entender mejor sus orígenes y sus causas.

Los expertos internacionales visitarán junto a científicos chinos el mercado de Huanan, todavía clausurado desde hace más de un año.

Irán también a otros lugares clave de la ciudad como el Instituto de Virología de Wuhan y su laboratorio P4 de máxima seguridad.

Pugnas políticas

La administración de Donald Trump en EE.UU. ha insistido desde hace meses, e incluso días antes de finalizar su mandato, en que el virus había salido de ese laboratorio de la capital de Hubei.

El pasado 17 de enero, el Departamento de Estado aseguraba tener "nuevas pruebas" de que se originó allí al afirmar que investigadores del laboratorio habían caído enfermos en otoño de 2019.

Pero no aportó ninguna evidencia que lo demostrase.

China, por su parte, calificó las afirmaciones de Washington de "mentiras y teorías de la conspiración".

Y ha resaltado en reiteradas ocasiones que el virus se detectó ya en el otoño de 2019 en varios países, lejos del gigante asiático.

Murciélago de herradura, principal sospechoso

Gran parte de la comunidad científica sitúa el origen del SARS-CoV-2 en los murciélagos de herradura.

Estos habitan en muchas partes del mundo y son numerosos en Asia.

El material genético del coronavirus que causó la pandemia es en un 96,22% igual al del coronavirus RaTG13, aislado en un murciélago de herradura en el sur del país asiático por científicos chinos.

A partir del murciélago, algunos creen que el virus pudo transmitirse al ser humano directamente.

Otros piensan que lo hizo por medio de algún tercer animal, como el pangolín o la serpiente.

También están los que consideran que el virus pudo estar adaptándose a los humanos durante un tiempo prolongado, hasta alcanzar su gran capacidad de transmisión y contagio actual.

El equipo de la OMS deberá identificar primero al paciente cero.

A partir de ahí deberá tirar del hilo para comprobar cuál de esas hipótesis es la correcta.

Aunque probablemente se necesiten más misiones y varios meses.

La OMS estudia también las informaciones que apuntan a la aparición del virus en otros lugares antes de que lo hiciese en China.

Pero ello no invalida que comiencen su misión en Wuhan.

"Este es un gran rompecabezas de 10.000 piezas y no puedes completar la imagen viendo solo una", resumió el director de emergencias sanitarias de la OMS.

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