Jueves, 28 de marzo de 2024

Elecciones: Colombia da un 'paso hacia lo desconocido'

Autor:

María Teresa Escobar

Actualizada:

18 Jun 2022 - 0:05

La elección presidencial en Colombia se define entre dos exalcaldes, a quienes la mayor parte de las encuestadoras sitúa en un empate técnico para la segunda y definitiva vuelta que se celebra este domingo.

Guatavo Petro y Rodolfo Hernández durante sus últimas actividades de campaña antes de la segunda vuelta electoral en Colombia.

Autor: María Teresa Escobar

Actualizada:

18 Jun 2022 - 0:05

Gustavo Petro y Rodolfo Hernández durante sus últimas actividades de campaña antes de la segunda vuelta presidencial en Colombia. - Foto: EFE

La elección presidencial en Colombia se define entre dos exalcaldes, a quienes la mayor parte de las encuestadoras sitúa en un empate técnico para la segunda y definitiva vuelta que se celebra este domingo.

Por primera vez en la historia colombiana, no habrá representante de los partidos políticos tradicionales ni de las poderosas dinastías regionales en la recta final de las elecciones presidenciales.

El economista y exguerrillero, Gustavo Petro (62 años), llega a la segunda vuelta con el Pacto Histórico, una coalición de partidos de izquierda y de centroizquierda.

Mientras que el ingeniero civil, Rodolfo Hernández (77 años), un 'outsider' sin orientación política clara, pero más alineado con la derecha, arriba con su movimiento Liga de Gobernantes Anticorrupción.

Petro cuenta una intención de voto de 47,2% y Hernández con un 46,5%, según el ponderador de encuestas de la Silla Vacía.

En primera vuelta, Gustavo Petro obtuvo un 40% de los votos (8,5 millones) y Rodolfo Hernández, un 28% (unos seis millones).

Ambos tienen profundas diferencias, pero también historias paralelas, y sus gestiones como alcaldes hablan solas.

La Presidencia de Colombia se define entre Gustavo Petro y Rodolfo Henández.

La Presidencia de Colombia se define entre Gustavo Petro y Rodolfo Henández. Agencias.

La basura sale a la luz

Petro fue alcalde de Bogotá entre 2012 y 2015, pero en diciembre de 2013, la Procuraduría lo destituyó por presuntos malos manejos en la reestructuración del servicio de recolección de basura.

El 13 de mayo de 2014, una decisión judicial permitió a Petro volver a la Alcaldía y terminar su mandato.

La crisis se desató tras el intento de Petro de estatizar la recolección de desechos, el experimento falló y debió contratar a empresas privadas para recoger el mar de basura en las calles de Bogotá.

Por su parte, Hernández estuvo al frente de la Alcaldía de Bucaramanga entre 2016 y 2019, pero fue suspendido dos veces.

La primera suspensión fue por propinarle una bofetada a un concejal, de lo que dice que se arrepiente.

La segunda fue por participar en política desde la Alcaldía, para apoyar a un candidato afín que buscaba sucederlo en el cargo.

Hernández renunció tres meses antes de concluir su periodo, con un escándalo de basuras a cuestas, pese a que su bandera política es la lucha anticorrupción.

Hasta hoy las autoridades investigan la presunta intervención de Hernández en la fallida licitación para contratar a una empresa encargada del tratamiento de los desechos de Bucaramanga.

La licitación fue, aparentemente, direccionada para favorecer a una sola empresa, llamada Vitalogic.

El contrato no se adjudicó porque la Procuraduría hizo observaciones, pero Hernández y su hijo quedaron involucrados.

El ahora candidato a la Presidencia se declara inocente y alega que su hijo fue engañado. El juicio por este caso comienza el próximo 21 de julio, un día después de la posesión del Congreso.

Propuestas polémicas

Tanto Petro como Hernández se esfuerzan por demostrar que son figuras que traerán un cambio profundo en la economía.

Más Impuestos:

Petro propone una ambiciosa reforma tributaria equivalente al 5,5% del tamaño de la economía colombiana, con impuestos más altos para los 'ricos', para las tierras fértiles no cultivadas.

Hernández habla de bajar el Impuesto al Valor Agregado (IVA), del actual 19% al 10% y de crear exenciones tributarias para los pequeños negocios.

Fondos de pensiones:

Una de las propuestas más radicales de Petro es la creación de un sistema de pensiones unificado y público, en un país donde la clase media ahorra en fondos privados.

Hernández promete una pensión universal básica de un salario mínimo mensual, y protección en salud para quienes no la tengan, además de un impuesto a las pensiones más altas.

Petróleo y minería:

Otra propuesta polémica de Petro es detener la explotación de nuevos yacimientos de petróleo y gas de esquisto (o fracking).

También ha dicho que no habrá nuevos contratos para exploración (búsqueda) de petróleo y que prohibirá la minería a cielo abierto.

Colombia tiene una de las minas a cielo abierto más grandes del mundo, llamada El Cerrejón, que produce 32 millones de toneladas anuales de carbón.

La minería y las actividades petroleras y extractivas representaron en abril el 60,8% del valor total de las exportaciones colombianas. ¿Con qué reemplazará Petro a ese motor?

Hernández habla de eliminar la fuerte dependencia de Colombia frente a los combustibles fósiles, como el petróleo y el carbón, pero a largo plazo.

Comercio Exterior:

En lo que coinciden ambos es en el proteccionismo comercial: hablan de incrementar los aranceles o impuestos de importación.

A lo que Petro agrega que renegociaría los acuerdos comerciales y Hernández dice que prohibiría la importación de los bienes agrícolas que Colombia ya produce.

Ninguno de los dos ahonda en las consecuencias de estas políticas proteccionistas sobre la inflación, que cerró mayo en un 9,07%. Colombia ha bajado los aranceles, especialmente de los alimentos, para combatir las alzas de precios.

El baratillo

Luego viene un baratillo de propuestas que difícilmente podrán cumplir: Petro promete puestos de trabajo en el Estado para los desempleados y educación universitaria gratuita.

Hernández dice que convocará a una rueda de prensa diaria para denunciar a los políticos y funcionarios públicos corruptos.

En medio del ruido, la conclusión que saca la revista británica The Economist es que "Colombia está dando un paso hacia lo desconocido".

El nuevo gobierno es una incógnita que pondrá a prueba la fortaleza de las instituciones colombianas.

Quién suma más votos

En caso de que el ganador sea Petro, Hernández ha declarado que respetará el resultado y hasta lo apoyará. 

Y Petro admitió que, si no vence en este tercer intento de llegar a la Presidencia, se retira pues "si ya no se pudo, no se pudo".

La explicación que encuentran los analistas para este panorama es que, a pesar del buen desempeño económico, Colombia es una nación cansada de la desigualdad.

Aunque el crecimiento del PIB per cápita es constante, pues pasó de USD 4.000 en 2000 a USD 6.400 en 2019, la polarización entre clases sociales es evidente.

Además, la pandemia de Covid-19 ha arrojado a 3,6 millones de personas (de una población de 51 millones) a la pobreza.

Ni el crecimiento de 10% del PIB, en 2021, ha podido cambiar el hecho de que hay 19,6 millones de colombianos sin ingresos suficientes para satisfacer sus necesidades básicas.

Cómo queda la gobernabilidad

La pregunta después de las elecciones del domingo es cómo quedará la gobernabilidad y la respuesta puede estar en el Congreso Nacional.

El movimiento de Hernández consiguió en las elecciones legislativas del 11 de marzo apenas dos representantes en la cámara baja del Congreso, y no presentó candidatos para el Senado.

Mientras que el Pacto Histórico, de Petro, logró 20 curules de 108 en el Senado, lo que lo convierte en la mayor bancada de la cámara alta.

El senado era una arena controlada por el Centro Democrático y el Partido de la U, ambos nacidos del liderazgo del expresidente Álvaro Uribe.

En la Cámara de Representantes, la primera fuerza es el Partido Liberal, liderado por el expresidente César Gaviria, con 32 asientos de 187; le siguen el Pacto Histórico, con 28; el Partido Conservador, con 25, y Centro Democrático, con 16 asientos.

Aunque parece haber más espacio para otras fuerzas por fuera del espectro de los partidos tradicionales, todavía no pueden cantar victoria en el Congreso.

El equilibrio dependerá de cómo se alineen los partidos tradicionales. En una muestra de cómo sería el panorama, Hernández ya recibió el apoyo del derrotado candidato Federico 'Fico' Gutiérrez.

'Fico' es la figura de la coalición Equipo por Colombia, que une a tiendas políticas desde liberales hasta conservadoras, con un peso decisivo en el Legislativo.