La Agencia de Control Metropolitana clausuró, la mañana del martes 20 de agosto de 2019, cinco bodegas que se dedicaban a la distribución de bebidas no alcohólicas sin la Licencia Metropolitana Única para el Ejercicio de Actividades Económica (LUAE).
Según informó la entidad, tres distribuidoras estaban ubicadas en el norte de la capital y dos en el sur, con lo que se fomentaba el comercio informal.
La AMC explica que este tipo de comercialización de productos es una forma de precarización laboral porque los vendedores ganan máximo USD 7 diarios, mientras que los distribuidores se llevan alrededor de USD 30.
El pasado 15 de agosto de 2019, la AMC clausuró tres bodegas que también se dedicaban a comercializar este tipo de bebidas bajo la misma modalidad: entregaban los productos a consignación a cambio de que los vendedores, que en su mayoría eran migrantes, dejen su cédula de identidad.
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