La joven Valeria Sacoto murió tras realizarse una cirugía estética en Guayaquil. Las autoridades hallan irregularidades en los permisos de funcionamiento de la clínica que la operó.
Luego de cinco días de la muerte de Valeria Sacoto, se emitió una alerta con respecto a la clínica de cirugía estética que operó a la joven médica de 28 años en Guayaquil.
La Agencia de Aseguramiento de la Calidad de los Servicios de Salud y Medicina Prepagada (Acess) emitió un comunicado que detalló una extraña situación con los permisos de funcionamiento de esa casa de salud.
En ese lugar, el pasado 23 de abril, Valeria Sacoto falleció tras realizarse una cirugía estética. Allí se sometió a una mamoplastia y lipoescultura.
En un inicio, el procedimiento pareció salir bien, sin embargo, Sacoto sufrió una descompensación que motivó su traslado a otra casa de salud.
Esa decisión la tomaron el cirujano a cargo, Manuel Iturralde y al anestesiólogo Felipe Gómez. Pero, pese al intento de salvar la vida de la joven, ella no resistió y murió.
El médico cirujano está procesado por homicidio culposo y mala práctica profesional. El anestesiólogo logró escapar.
Doble permiso de funcionamiento
Este 29 de abril, el Acess comunicó las acciones desplegadas por este caso. En primer lugar, la agencia manifestó que se realizó una inspección de la clínica, luego de la denuncia respectiva.
Esa diligencia se realizó el 24 de abril y lugar fue clausurado, pues presentó un permiso de funcionamiento caducado.
Sin embargo, al continuar con las investigaciones, se evidenció que esta clínica cuenta con dos unicódigos.
El unicódigo es el Registro Único de Establecimientos de Salud. Este permite que se obtenga el permiso de funcionamiento correspondiente.
Extrañamente, la clínica que operó a Valeria Sacoto cuenta con dos de estos registros, lo que permitió que siga activa, pues uno de ellos sí cuenta con permiso de funcionamiento vigente.
Sobre esto, el Acess manifestó que tomará acciones para conocer el motivo de que el establecimiento tengo un permiso vigente, pese a presentar un vencido en las inspecciones.
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