Los detenidos serían integrantes de bandas delictivas que han cometido ataques armados en las camaroneras y robos de emebarcaciones en la Isla Puná.
Las Fuerzas Armadas efectuaron un gran operativo en la Isla Puná, en el Golfo de Guayaquil, en donde interceptaron una embarcación que llevaba 2.000 galones de combustible artesanal, que se presume serían usados para actividades del narcotráfico.
El operativo tuvo un gran despliegue de personal de las Fuerzas Armadas por aire, mar y tierra. Participaron unos 150 militares, 11 lanchas del Comando de Guardacostas y de la Infantería de Marina, dos helicópteros con francotiradores.
Los marinos identificaron a ciudadanos que se transportaban en una lancha en actitud sospechosa. Al interceptarlos, los sujetos empezaron a disparar a los militares y lanzaron las armas al mar.
Las unidades marinas repelieron el ataque y capturaron a ocho sujetos que estaban a bordo. Las autoridades presumen que ellos serían responsables de varios delitos que se cometen en la Isla Puná, como ataques armados a camaroneras, robos de embarcaciones y gabarras.
En la embarcación también había chalecos antibalas, municiones y uniformes militares. El combustible incautado se comercializaba de forma ilegal en alta mar.
Marco de la Torre, comandante de Infantería de Guayaquil, explicó a Ecuavisa que se presume que el combustible sería usado para actividades conexas al narcotráfico, como el contrabando de droga a países de Centroamérica.
La Isla Puná es una zona estratégica, porque es parte de la ruta usada por los grupos de narcotráfico que operan en Ecuador.
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