Viernes, 19 de abril de 2024

La adicción a los videojuegos ya es considerada una enfermedad mental por la OMS

Autor:

EFE

Actualizada:

11 Feb 2022 - 12:51

La Clasificación Internacional de Enfermedades de la OMS codifica 1,6 millones de casos clínicos y supone la primera revisión de la lista en 30 años.

Autor: EFE

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11 Feb 2022 - 12:51

Gamer practicando con una consola. - Foto: Reuters

La Clasificación Internacional de Enfermedades de la OMS codifica 1,6 millones de casos clínicos y supone la primera revisión de la lista en 30 años.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó el 11 de febrero de 2022 la nueva lista de enfermedades reconocidas por el organismo, y por primera vez incluyó a la adicción a los videojuegos en el apartado de desórdenes mentales.

El listado fue aprobado por la OMS en su asamblea de mayo de 2021.

La undécima Clasificación Internacional de Enfermedades de la OMS (ICD-11), que es utilizada por los profesionales de la salud para estandarizar su labor, codifica 1,6 millones de casos clínicos, y supone la primera revisión de la lista en 30 años, por lo que la anterior pertenece a un tiempo en el que este trastorno apenas existía.

La OMS busca con esta inclusión mejorar las estadísticas sobre adicción a los videojuegos en el planeta, ya que antes de esta estandarización los estudios han ofrecido cifras enormemente variables sobre la prevalencia de este trastorno, que oscilan desde el 1% de la población hasta incluso el 50%, en algunos países de Asia.

Robert Jakob, jefe del equipo de la OMS que recopiló la lista, dijo que algunos signos de esta enfermedad son: no poder parar de jugar en Internet o con una consola, desatender las amistades o el trabajo a causa de ello, en periodos superiores a un año, pueden ser síntomas de esta adicción.

La inclusión de este trastorno por parte de la OMS no estuvo exenta de polémica. La industria de los videojuegos protestó contra esto, argumentando que no había bases sólidas para considerar esta adicción como una enfermedad mental.

La ICD-11, elaborada con datos de más de 90 países, es, a diferencia de sus antecesoras, exclusivamente digital, sin versión en papel, e incluye también novedades en materia de medicina tradicional y salud sexual, según destacó hoy la OMS en un comunicado.