Los linfocitos T son conocidos como las células de la inmunidad, capaces de reaccionar ante los agentes externos como un virus o bacterias. Varios estudios señalan que estas células se activan ante las nuevas variantes.
La inmunidad celular cumple un papel fundamental en el estudio de pacientes que han tenido Covid-19 y las personas que ya han sido vacunadas.
Esta inmunidad o también llamada respuesta inmunitaria surge cuando el paciente se ha infectado en el pasado, y se forma de un conjunto de células T o linfocitos T.
Recientemente, una investigación del Instituto de Inmunología de La Jolla y de la Universidad de California en San Diego (Estados Unidos) analiza el papel de estas células inmunitarias.
Si bien a diferencia de los anticuerpos, no evitan que una persona vuelva a contraer la infección, en caso de un contagio las células T ayudan a eliminar el virus. Además evitan que la infección sea grave.
Por otra parte, el estudio indica que la inmunidad celular se mantiene en el organismo y protege a la persona frente a las nuevas variantes del SARS-CoV-2.
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